CORTÉS, HONDURAS. Familiares y amigos dieron ayer el último adiós a Jefry Alexander Rodezno Baires, el joven contratista que murió a disparos por no cederle el paso al conductor de un pick-up color blanco el pasado miércoles en el sector de Viveros.
En medio del dolor y la consternación, la progenitora de Rodezno Baires, identificada como doña Enma, confesó a un medio de comunicación que ese mismo día, su hijo le había pedido que orara por él.
«Me dijo que le hiciera unas ‘burritas’ y se las hice. Cuando se iba, me dijo que orara por él, que yo tenía que ungirlo siempre. Le dije: ‘Que te vaya bien en nombre de Jesús'», recordó entre lágrimas la señora.
Al mismo tiempo, señaló que Jefry era un excelente hijo, atento y preocupado por la salud de su madre (ella). «Era un excelente hijo, amoroso con su madre. Él me tenía al cuidado de todo. Pensaba en mi dieta porque padezco de la presión y me llevaba al médico», dijo doña Enma.
Por otro lado, «A Jefry le gustaba el arte culinario: hacía taquitos mexicanos. Inventaba unas salsas y aderezos”, rememoró.
Lea también: Así fue la «pelea de vía» en SPS por la que mataron a un conductor
Sobre la muerte de su hijo
Referente a lo ocurrido esa mañana del miércoles cuando su hijo se diría hacia su trabajo, doña Enma señaló que “Considero injusta la muerte de mi hijo, porque era una cosa que se podía arreglar», dijo.
Al mismo tiempo, aseguró que a Jefry lo estaban esperando sus empleados, y por tal razón, el también «iba rápido». «Dicen que otro carro quería pasarle a él y le golpeó el vehículo. Cuando chocaron los dos carros, el hombre del carro blanco, sin abrir los vidrios, le disparó”, lamentó doña Enma.
«Él iba rápido para su trabajo porque lo estaban esperando. Que se haga la justicia divina”, dijo concluyó la señora.
