Chelcie Cookson es una instructora de gimnasio neozelandesa que reside en Australia y fue duramente criticada por numerosos usuarios de Facebook luego de encontrarse con un indigente, a quien obsequió un pase para el gimnasio en el que trabaja.
Los reproches a su accionar no habrían sido grandes si la anécdota quedara ahí, pero el hecho de que la mujer haya señalado que creía “poder cambiar la vida” de un hombre más preocupado en encontrar algo que comer con una membresía de gimnasio, fue una mala señal.
La entrenadora personal publicó un video en Facebook en el que narraba su encuentro con un hombre de 46 años a quien únicamente llamó Steven. Según contó la misma Chelcie, preguntó al hombre si deseaba seguir sin trabajo y qué haría si pudiera conseguir uno.
“Después de meditarlo, vino a mí la idea de lo que podría hacer por él y me di cuenta de que era el ejercicio. El ejercicio es la llave para muchas cosas”, cuenta la mujer en el video a la vez que agrega que, de llevarlo al gimnasio, el hombre incluso podría usar las duchas de ahí.
Steven se negó cinco veces según cuenta la propia instructora, quien ya había imaginado que haría que le corten el cabello y que tuviera un pequeño armario en el gimnasio. “Le dije que no tenía una maldita opción, que iba a venir conmigo”, fue la respuesta de la mujer a las negativas del indigente.
Chelcie incluso le dijo al sujeto que si iba al gimnasio, él podría “hacer cosas que ni siquiera se molestaría en hacer por él mismo si tuviera dinero”. A esas alturas el video de la entrenadora personal en Facebook ya era molesto para muchos, pues más de un usuario de la red social consideraba que era muchísimo más importante asegurarse de que Steven tuviera algo que llevarse a la boca o una cama en la cual dormir en lugar de ir al gimnasio. Otros apuntaban que la mujer únicamente se valía del pobre hombre para llamar la atención.
Las críticas continuarían y más adelante la mujer compartió otro video defendiéndose y señalando que Steven había acudido al gimnasio con ella.
Fuente: El Comercio
