Redacción.– Un estudio llevado a cabo en ratones por investigadores del Hackensack Meridian Health (Estados Unidos) y publicado en el ‘International Journal of Molecular Sciences’ ha mostrado que el coronavirus ataca primero al tejido graso en las mujeres y no el pulmonar, lo que podría explicar el motivo por el que este virus mata a más hombres.
«Nuestros datos sugirieron que en los ratones hembra. El tejido adiposo puede actuar como un sumidero/depósito para el SARS-CoV-2. Por lo tanto, evita que los pulmones sufran una mayor carga viral, previniendo el daño pulmonar debido a las células inmunitarias infiltradas y las citocinas proinflamatorias activadas», han comentado los investigadores
Los modelos de ratón imitan el sistema inmunológico humano. Ellos mostraron que las hembras perdieron más grasa en comparación con los machos cuando se infectaron con COVID-19. De hecho, los machos tenían más virus en los pulmones, mientras que las hembras mostraban más virus en el tejido graso. Los investigadores consideran que el tejido adiposo (grasa) en las mujeres puede actuar como un ‘sumidero’ o ‘depósito’ del virus.
El covid persistente afecta más a las mujeres
Mientras que las tasas de mortalidad por Covid-19 son más altas en los hombres, las mujeres tienen más riesgo de padecer secuelas tras una infección. Así lo reveló un estudio publicado en la revista científica ‘Current Medical Research and Opinion’. Concluyeron que el sexo femenino es un factor riesgo para el desarrollo del Covid persistente. Los investigadores señalan que las posibilidades de sufrir esta enfermedad derivada de la Covid-19 es un 22% mayor cuando se trata de mujeres. Además, estas también experimentan diferentes síntomas que los hombres.
Estos resultados coinciden con los de otros estudios que también ponen rostro femenino a esta enfermedad. En 2020, una Encuesta la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) y los colectivos de afectados LONG COVID ACTS concluyó que una «mujer de 43 años y con más de 185 días padeciendo síntomas, entre un abanico de 200 como el cansancio, los dolores de cabeza y musculares, el bajo estado de ánimo o la falta de aire» era el perfil del paciente de covid persistente.
Otro estudio de enero de 2022 publicado en la revista ‘Journal of Clinical Medicine’ y realizado con pacientes de covid-19 ingresados en cinco hospitales públicos españoles durante la primera ola, demostró que, ocho meses después del alta, las mujeres presentaron más síntomas de fatiga, disnea, dolor, pérdida de cabello, problemas oculares, depresión y peor calidad del sueño que los hombres.
«Reconocer que la covid-19 afecta de manera diferente a mujeres y hombres es un paso crucial hacia una mejor comprensión de la fisiopatología. También a la naturaleza de las secuelas y síntomas postcovid y la promoción de soluciones de atención médica individualizadas», destacó la profesora del Departamento de Psicología Evolutiva de la UV y participante en la investigación, Esperanza Navarro-Pardo.