Los errores persiguen a los porteros. La importancia de sus intervenciones hace que cada ocasión en la que no están atinados tiene más resonancia.
El de De Gea en el Camp Nou será difícil que el portero lo olvide. El guardameta cometió un clamoroso error que provocó el segundo gol del Barça y de Messi, que había marcado solo unos minutos antes en el Camp Nou.
El Manchester United buscaba la remontada frente al Barça en los cuartos de final de la Champions. Messi había complicado el partido para sus intereses con un disparo desde la frontal muy difícil de parar.
Solo unos minutos después, en el 20, Messi volvió a circular por la frontal del área y soltó un disparo con la diestra. El balón iba más manso que en la ocasión anterior, pero en su intento de detenerlo, se le coló por debajo de los brazos en una error ridículo.
No sabía donde meterse el portero internacional de la selección española. Con este nuevo gol, el Barça decidió la eliminatoria para estar en las semifinales de la Champions League.
