REDACCIÓN. Disney cerró la compra de 21st Century Fox, la división de entretenimiento de Fox, por 62.800 millones de euros; tras haber recibido en las últimas semanas luz verde de los reguladores de varios países.
Asimismo, de la operación nace un gigante del entretenimiento de un tamaño nunca antes visto hasta la fecha; englobará bajo su paraguas, entre otros contenidos, a Star Wars, Marvel, Pixar, The Simpsons y Avatar.
La adquisición y los contenidos que implica allana el camino para el lanzamiento previsto este 2019 del servicio de suscripción de Disney, Disney+; con el que pretende competir con Netflix, el líder del sector.
Disney toma el contro del estudio 20th Century Fox, los canales FX y National Geographic o el 30% del servicio de suscripción Hulu. Con esto alcanzará el 60% de la plataforma.
«La combinación de la riqueza de contenido creativo y talento comprobado de Disney y 21st Century Fox crea la compañía de entretenimiento global preeminente. Bien posicionada para liderar en una era increíblemente dinámica y transformadora», dijo el consejero delegado de Disney, Bob Iger, en un comunicado.
También la compañía de Iger prometió a los accionistas un ahorro de 2.000 millones de dólares hasta 2021. Pero provocará un despido masivo que, según algunas estimaciones, afectará a 4.000 trabajadores. Con la adquisición, Disney absorbe 15.400 trabajadores de 21st Century Fox.
Además, pese a la venta de la división de entretenimiento, el hasta ahora propietario del imperio Fox, el magnate Rupert Murdoch, mantendrá la propiedad de Fox News y de Fox Sports 1 (FS1), agrupados bajo Fox Corporation, enfocada en noticias y deportes.
Hollywood
Disney ya era el gran dominador de Hollywood antes de la compra, gracias a exitosas marcas como Lucasfilm, Pixar o Marvel.
A finales de 2017, Disney ofertó 52.400 millones de dólares por la operación cerrada. Sin embargo, una propuesta de Comcast a Fox por 65.000 millones los obligó a elevar la oferta hasta 71.300 millones. Esto equivale a 38 dólares por acción.
