La felicidad navideña del clan Kardashian-Jenner se vio interrumpida esta Nochebuena cuando el equipo de seguridad de Kylie Jenner llamó a la joven para informarle de que habían detenido a un intruso que estaba tratando de entrar a su mansión, en el barrio de Calabasas, en Los Ángeles. Según el portal TMZ, el intruso disparó las alarmas al forzar la cerradura lo que alertó a los vigilantes quienes llamaron rápidamente a la policía.
El hombre había intentado entrar en la mansión de la modelo, de 2.500.000 euros, hasta en 10 ocasiones. Tras la detención, el intruso fue trasladado a un centro psiquiátrico para ser tratado de su obsesión. Esta es la segunda vez que un miembro de su familia tiene un problema con un acosador en la misma semana: la madre de Kylie, Kris, se encontró cara a cara con otro en su propio hogar mientras que Kim Kardashian y los niños estaban en la segunda planta.
Los fans de Kylie no tienen que invadir su hogar para conocerlo por dentro; la modelo, de 18 años, ha publicado en su página web una visita virtual —de pago— por las habitaciones de su mansión. «Quería que toda mi casa fuera en blanco y negro», explica Jenner. Su cuarto favorito, como el de la mayoría de las famosas, es su armario de zapatos: «¡Siempre quise uno! Es el sueño de cualquier chica», relata la estrella.