Redacción. En la era actual, marcada por el teletrabajo y la búsqueda de la comodidad, se ha acentuado un estilo de vida sedentario y un mayor consumo de alimentos procesados. Esta tendencia, presente en países desarrollados como España, ha generado un preocupante aumento de los niveles de azúcar en sangre.
No obstante, un estudio reciente de la Universidad de Limerick arroja luz sobre una solución simple pero efectiva: dar un breve paseo después de comer. Esta práctica, al parecer, puede tener un impacto significativo en la salud metabólica.
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Estudios
Un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina (NIH), encontró que levantarse y caminar un poco durante largos periodos de sedentarismo ayuda a bajar el azúcar en la sangre. No se necesitan entrenamientos intensos, solo pequeñas pausas para moverse y mantenerse activo durante el día.
Un paseo después de comer no solo baja el azúcar en la sangre después de las comidas, sino que también mejora la forma en que el cuerpo responde a la insulina.
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Reducir el estrés
Los especialistas señalan que caminar después de comer también ayuda a reducir el estrés, lo cual es muy importante porque el estrés puede aumentar los niveles de azúcar en la sangre al liberar cortisol, una hormona que dificulta su control.
Los investigadores de la Universidad de Limerick recomiendan caminar un poco justo después de comer para mejorar la salud a largo plazo. No hace falta caminar mucho ni muy rápido, solo unos minutos de caminata moderada son suficientes para una excelente salud.