REDACCIÓN. El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), informó que alrededor de unos 135 defensores de Derechos Humanos han muerto de manera violenta desde el 2014 y que el 95% de esos crímenes están en la impunidad.
Según el informe del Conadeh entre el 2021 y lo que va del 2023, alrededor de 40 defensores de los derechos humanos han muerto bajo circunstancias de violencia. Víctimas en su mayoría, dedicadas a la defensa de los pueblos aborígenes, la tierra, los territorios, defensa del ambiente y defensa de personas de la comunidad LGTBI.
De acuerdo con el estudio en el año 2021, 11 defensores perdieron la vida violentamente, el año siguiente 18 personas y en lo que va de este 2023, han muerto alrededor de 12.
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Dentro de los departamentos en los que más se ha registrado muerte de defensores de DDHH están Colón, Atlántida y Yoro.
Ante las alarmantes estadísticas la titular del Conadeh, Blanca Izaguirre, condenó el hecho de que Honduras continúe siendo uno de los países más peligrosos. Especialmente para la defensa de los derechos humanos en el continente.
A su vez, consideró urgente adoptar una política pública integral de protección para los defensores de derechos humanos.
Comunidades más afectadas
Por otra parte, el Conadeh señaló en su estudio que entre los pueblos más afectados por amenazas. Entre ellos están las comunidades Lenca, Tolupán, Garífunas, Chortí, Pech y Misquitos. Se ve afectados principalmente por la defensa de sus tierras.
El último suceso ocurrió el pasado 28 de mayo con el caso del defensor de derechos humanos y líder de la comunidad garífuna del Triunfo de la Cruz, Martín Morales Martínez encontrado muerto, en el rio Gama.
Morales era integrante del Comité y la Comisión para la ejecución de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. También era integrante del Comité de Defensa de la Tierra (CODETT) de la misma comunidad.