Ilsa Diaz Zelaya
El enviado especial de la OEA, posiblemente nunca se hubiera imaginado la compleja y delicada situación que se iba a encontrar al haber aceptado venir a estas Honduras, a tratar de organizar un dialogo nacional para superar la profunda división que ofrece en la segunda decena del siglo XX! la sociedad hondureña.
Hay que reconocer que solamente en dos visitas, ha tenido el suficiente tiempo para detectar como buen cirujano de los problemas sociales, que la mayor enfermedad de nuestro país, reside en el sistema de Justicia, en la aplicación tardia, y a veces corrupta, con carencia de recursos economcos suficientes, como para tener la facilidad de coordinar en una línea horizontal, independiente, eficaz y oportuna, a todos los órganos y personas que son actores de una forma u otra de la aplicación de las leyes, pues a pesar de una legislación moderna , de ciertas reformas sustanciales en algunos de sus órganos, aun carece de resultados que garantizen un debido proceso, y den seguridad jurídica a los empresarios a los dueños de propiedades, al combate efectivo de la corrupción y concluir a reducir la enorme brecha de impunidad pues como lo dice JB del Rio, es una situación que se viene arrastrándose de hace mucho tiempo. Recordemos que el vivio en Honduras varios años.
Tambien ha identificado a los interesados en proponer el establecimiento de agentes externos para que vengan a decirnos lo que tenemos que hacer. Ha criticado a los políticos, porque todos quieren ser presidentes, y a Mel Zelaya de un manotazo lo sacó del grupo de los indignados originales, que al fin del cuento el podría tener razón, pues además de irse a Guatemala en un desaire publico a quien ellos habían solicitado su presencia, se han declarado partidarios de Libre.
El Señor Bielh tendrá que regresar dentro de poco, y esperamos que grupos que se han apresurado a criticar sus propuestas y comentarios, tengan la suficiente inteligencia, para razonarlos a fondo, y proponer cosas congruentes con la realidad de un país, que tiene no solo problemas políticos, sino que económicos y ambientales que amenazan su futura existencia como nación.
De lo contrario, el no podrá seguirse reuniendo con grupos que faltan entrevistarse con él , como son las iglesias, la comunidad internacional que le puede dar valiosos insumos, las fuerzas Armadas, las Academias,los medios de comunicación reconocidos por su ética y sus aportes al desarr0llo de los pueblos- Habrá dialogo o no? Se preguntan muchos, o nos quedaremos gritando como dice él como niños malcriados, queremos Sisi con hache o sin hache, y queremos, queremos….queremos….queremos…y cuando menos lo esperemos, nos tocará estar frente a las urnas, y con antorchas encendidas. pero de que lado?.
Dios quiera que no, en este mes de la Patria, lo ultimo que nos puede pasar, es perder la esperanza en nuestra amada Honduras.
