Redacción. Un juez dictó la medida de prisión preventiva en contra de tres colombianos acusados de cometer ilícitos relacionados con la estafa, utilizando tarjetas de crédito y débito clonadas en la ciudad de La Ceiba, Atlántida.
Estos tres hombres son John Fredy Romero Almanza, César Bryan Montaño Guerra y Jonathan Smith Escorcia Jiménez. A ellos se les dio captura hace unos días en la ciudad mencionada.
La medida fue lograda por la Fiscalía Regional del Litoral Atlántico (FRLA), en conjunto con la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO), tras la correspondiente audiencia inicial, que se desarrolló en el Juzgado de Letras con Competencia Nacional en Materia de Criminalidad Organizada de San Pedro Sula, Cortés.
A los tres imputados se les supone responsables al título de autores de los delitos de estafa en perjuicio de una institución bancaria y Dania Ivett Cálix Hernández. Asimismo, se les acusa de asociación para delinquir en perjuicio de los derechos fundamentales.
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El juez que conoce la causa determinó que los tres deberán cumplir la prisión preventiva en el centro penal de El Porvenir, Atlántida.
¿Cómo operaban?
Las investigaciones han determinado que la manera de operar de los colombianos consistía en causar daños sistemáticos en cajeros automáticos. Introducían una tarjeta bancaria a la que aplicaban pegamento para dañar la banda magnética.
Una vez que el cajero quedaba inutilizado, se acercaban a las víctimas ofreciéndoles ayuda; sin embargo, en realidad se trataba de engaños. De esta manera, lograban intercambiar las tarjetas de los clientes por las que ellos portaban, quedándose con el plástico del afectado.
Este acto delictivo les permitía realizar retiros en otros cajeros automáticos, ocasionando así perjuicios económicos significativos tanto a las víctimas como al banco. Se estima que las pérdidas para la institución ascienden a unos 400 mil lempiras.
Por el momento, se han interpuesto múltiples denuncias en contra de los imputados, revelando que otras instituciones bancarias también resultaron afectadas por estos delitos, que se han perpetrado en Tegucigalpa (capital) y San Pedro Sula.
La información proporcionada por Interpol revela que estas personas cuentan con órdenes de captura y condenas en Colombia por los mismos delitos.
