REDACCIÓN. Chaser, descrito como «el perro más inteligente del mundo» por su capacidad para reconocer los nombres de más de 1.000 objetos, murió a los 15 años.
El psicólogo estadounidense John Pilley enseñó a esta hembra de border collie 1.022 sustantivos mediante juguetes y otros métodos en sesiones de entre cuatro y cinco horas diarias durante tres años.
Como parte de su entrenamiento, ese hombre mostraba al animal un objeto y repetía varias veces su nombre, lo escondía y le pedía que lo encontrara.
Además de reconocer objetos singulares, Chaser podía buscar entre ellos a los que tienen apariencia similar y distinguir cosas por su forma (algo que los niños se les enseña a hacer a los tres años).
En 2013, Pilley publicó un estudio en el que exponía que ese animal podía comprender oraciones que contenían un complemento preposicional, un verbo y un objeto directo.
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Muerte natural
Su dueño falleció en 2018 a los 89 años y, desde entonces, Chaser quedó al cargo de su esposa y una de sus hijas en Spartanburg (Carolina del Sur, EE.UU.).
Otra pariente de ese psicólogo explicó que en las últimas semanas la salud del can había empeorado y murió por causas naturales, informó el diario The New York Times.
Los propietarios de Chaser enterraron los restos de su mascota en el patio trasero de su casa junto a las cenizas de John Pilley.
La hija del psicólogo informó que la salud desmejoró mucho desde la partida de su padre. Ella quiso dejar en claro que el perro no poseía una inteligencia sobrenatural sino que lo excepcional fue la manera en la que fue educada.
Una organización que defiende a los animales ha decidido patrocinar la construcción de una estatua de bronce de ambos, que se instalará en las inmediaciones de un museo de Spartanburg.
