AFP. Autoridades del estado mexicano de Sonora (noroeste) desplegaron un operativo para localizar a diez migrantes colombianos que habrían sido secuestrados cuando intentaban cruzar la frontera con Estados Unidos, informó este viernes la secretaría de Seguridad local.
«A partir de una solicitud del consulado general de Colombia en México, la Mesa de Seguridad realiza operativos para localizar a 10 personas colombianas, luego que familiares perdieran el contacto», informó la dependencia en su página de Facebook.
La última comunicación se produjo cuando los migrantes se encontraban en San Luis Río Colorado. Desde donde buscaban cruzar a Estados Unidos, añadió la secretaría.
La organización 1800Migrante denunció en su página de Facebook que el rapto habría ocurrido el pasado martes. Esto, cuando los colombianos viajaban en un autobús que fue interceptado por presuntos criminales.
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Según esa versión, un familiar de las víctimas que logró permanecer en el vehículo relató que «la mafia los había bajado». Esto, antes de entrar a San Luis Río Colorado.
Serían de una misma familia
De acuerdo con 1800Migrante, los colombianos serían miembros de una misma familia «que venían escapando de su país por razones de violencia, ya que en Bogotá fueron víctimas de actos criminales y amenazas contra su integridad».
La organización aseguró además que se desplazaban en un autobús de una compañía que habría estado involucrada en el secuestro de 63 migrantes. Los afectados provenían de Ecuador, Colombia, Venezuela, Perú, República Dominicana y México.
A finales de abril, las autoridades rescataron con vida a los integrantes de este grupo.
También el mes pasado, una familia de colombianos fue atacada a balazos en el norteño estado de Zacatecas. El conductor del vehículo en que transitaban se negó a detenerse en un retén de presuntos criminales. Al menos dos de los extranjeros murieron.
Estos incidentes ocurren en momentos en que las autoridades mexicanas multiplican sus llamados a los migrantes para que no se desplacen a la frontera, con la falsa idea de que Estados Unidos les permitirá el ingreso a partir del próximo jueves.