SAN PEDRO SULA, HONDURAS. Hoy martes en horas tempranas debido al reciente clima y tormentas que se han apoderado de la región, las raíces de un gigantesco árbol que está cerca de un call center, se debilitaron y el árbol terminó cayendo de forma expedita sobre las instalaciones donde se labora como servicio al cliente.
Elementos de el Cuerpo de Bomberos asistieron inmediatamente al lugar tras enterarse de lo ocurrido y dijeron que por fortuna no hay personas lesionadas.
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Un gran número de colonias fueron afectadas por las lluvias que han azotado desde el domingo pasado a San Pedro Sula, informó a Tiempo Digital, Rodríguez Cunino, relacionador Público del Cuerpo de Bomberos de esta ciudad.
El Cuerpo de Bomberos de San Pedro Sula se concentró en ayudar a despejar vías públicas que han sido bloqueadas por restos de árboles caídos y ayudar con la potencial evacuación en ciertas áreas de la ciudad.
Según las estadísticas que maneja los Bomberos estas fueron las colonias más afectadas: Las palmas, Ideal, Barandillas, Cabañas, Calpules, Montefresco, San Vicente de Paul, Pastor Zelaya, Valle de sula # 1, Miguel Ángel Pavón, Rivera Hernández, El Carmen y Santa Mónica.
El caso de la colonia Santa Mónica fue excepcional, según la opinión de Cunino, puesto que nunca se habían presentado problemas por lluvias en esa famosa residencial privada de San Pedro Sula.
La lluvia que cayó la tarde del domingo arrastró una cantidad considerable de restos de árboles hacia la entrada principal, bloqueando así el acceso a los que ahí viven.
Puesto que la calle justo enfrente de la entrada a la colonia es muy transitada por vehículos que vienen de Puerto Cortés, se produjo una congestión vehicular importante. Por lo que el Cuerpo de Bomberos se hizo presente para despejar el acceso bloqueado utilizando motosierras, hachas y machetes.
Rodríguez Cunino informó también que debido a los fuertes vientos cayeron árboles en varias arterias viales de la ciudad a las que asistió el Cuerpo de Bomberos prontamente para despejarlas.
Por otra parte, se estuvieron realizando inspecciones en áreas propensas a inundaciones, tales como los vados de las colonias Colombia y Juan Lindo, ubicadas por el segundo anillo periférico de la ciudad.
Los resultados de la inspección demostraron que no era necesario evacuar a los habitantes, sin embargo, se alertó a los pobladores que si subían más las crecidas debían seguir sus instrucciones.
“Se nota que hay una labor previa, la cual facilita que la gente acepta las directrices que nosotros les damos”, expresó Rodríguez Cunino, en referencia al trabajo realizado por la Unidad de Gestión de Riesgos y la Asociación de Bordos.
Después de las inundaciones, el otro problema que preocupa a los Bomberos son los derrumbes. Zonas en las que se encuentran las colonias Lempira, Juan lindo, Primavera y Gracias a Dios son de mucho riesgo porque los grados de inclinación de los terrenos donde las casas están construidas llegan hasta 50 grados.
Se le recomienda a las autoridades la construcción de cunetas y a la población que estén pendientes de las inclinaciones o grietas en las mismas viviendas.
Además, se les indica que encontrar descuadres en las puertas o ventanas indican desnivel, señal de que hay que evacuar de inmediato.
