Redacción. Un juez con jurisdicción nacional dictó este lunes prisión preventiva en perjuicio de los ciudadanos Guilfredo Cerrato Santos y Kerin Francisco Maldonado Aguilar, ambos acusados por los delitos de fraude y uso de documentos falsos, en perjuicio de la administración pública.
A los detenidos los suponen responsables de la compra de siete camiones para el Cuerpo de Bomberos, con fallas mecánicas y técnicas, por un costo superior a los 81 millones de lempiras.
Tras el dictamen judicial, elementos de seguridad trasladaron a los imputados hasta las instalaciones del Centro Penal de Támara, donde guardarán prisión hasta la próxima audiencia.
Bárbara Castillo, portavoz del Poder Judicial, detalló a medios locales que hay dos personas más involucradas. Se trata de “el exministro de Gobernación y Justicia, Héctor Leonel Ayala y Héctor Martín Cerrato Velásquez«, especificó.
El ente de justicia está a la espera de que los dos implicados se presenten para la audiencia de declaración de imputados.
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Investigaciones
A Guilfredo Cerrato Santos se le considera uno de los asesores del exministro Leonel Ayala Alvarenga. Entre tanto, Kerin Francisco Maldonado Aguilar, era el representante legal en Honduras de la empresa israelí B SAFE Security.
Las investigaciones en torno a este caso establecen que Leonel Ayala Alvarenga y sus asesores presionaron al Estado para que se realizara la compra de manera directa a la compañía B SAFE Security. Sin embargo, la empresa no estaba registrada de manera legal en Honduras.
Asimismo, el MP destacó que a pesar de que no se contaba con los fondos suficientes, los imputados amenazaron con despidos en los bomberos.
Además, gestionaron transferencias de las alcaldías del Distrito Central y San Pedro Sula, a las cuentas de la institución benemérita, para así concretar la estafa.
También, el MP informó que Kerin Francisco Maldonado presentó una oferta engañosa, prometiendo camiones nuevos de la marca alemana «MAN», con tecnología avanzada para combatir incendios.
Sin embargo, al final se adquirieron carros con fallas mecánicas y técnicas graves. Un peritaje forense señaló que se encontraron irregularidades en el estampado de la serie del motor y la carrocería de los camiones, y que no corresponde a la marca MAN.
También, las investigaciones de parte de la fiscalía señalaron que los camiones que se compraron no son aptos para trasladar agua. Es decir, que son un peligro para la capacidad de respuesta de los bomberos.