TEGUCIGALPA, HONDURAS. Pese a que todavía faltan unas semanas para iniciar diciembre, mes donde se celebra la Navidad, Honduras registra ya cuatro niños quemados y afectados por la manipulación de pólvora.
De estos 4 menores, tres ingresaron al Centro Hondureño para el Niño Quemado (CEHNIQ) en Tegucigalpa, mientras que el otro permanece en el Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula.
Alfredo Ortiz, portavoz del CEHNIQ, detalló que esta cifra se contabiliza desde el pasado mes de octubre a la fecha. A su vez, resaltó que la tendencia muestra una estadística similar a la del año 2023.
«Previo a la Navidad y partiendo de octubre a la fecha son cuatro casos. Tres son provenientes de Francisco Morazán y el uno de Omoa, Cortés, que es el más reciente», expresó el portavoz.
Lea además: Hasta L20,000 de multa por vender pólvora pagarán en San Pedro Sula
Varones y menores de 15 años
Por otro lado, Alfredo Ortiz explicó que los menores que han resultado afectados por pólvora, son varones, y presentan quemaduras en sus extremidades. Quienes oscilan entre 6 y 15 años de edad.
«Tienen afectaciones en sus brazos, tórax y abdomen», indicó el portavoz. En tal sentido, la recomendación a los padres y adultos sigue siendo no darles pólvora a los niños y estar pendiente de lo que hacen y con lo que juegan.
Por último, Ortiz destacó que en comparación al 2023, la tendencia se mantiene y no se descarta un aumento. Del mismo modo, resaltó que este año el primer quemado por pólvora se registró más temprano que el año anterior.
En el caso de las dos ciudades más importantes de Honduras, Tegucigalpa y San Pedro Sula, desde sus municipalidades se emite una ordenanza que prohíbe la venta de pólvora y es con la intención de evitar que niños resulten quemados y mutilados.