Redacción. Mejor conocida como «La Novia de Honduras», La Ceiba es uno de los destinos turísticos más visitados cada vez que los hondureños tienen la oportunidad de vacacionar y este feriado morazánico no es la excepción, pues entes competentes mencionan que ya han recibido hasta más de 60 mil personas.
Florentino Martínez, de la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), detalló que la Comisión Nacional de Prevención en Movilizaciones Masivas (CONAPREMM) está activa al 100% desde el día miércoles en vista de los desplazamientos masivos de viajeros a la zona norte del país.
«Han ingresado del lunes, hasta el día de ayer (jueves), más de 68 mil excursionistas. Un total de 116 mil vehículos y falta cuantificar la parte marítima y aérea. Hasta los momentos esa es la estadística», expresó Martínez.
Asimismo, precisó que sólo en Atlántida poseen 23 puntos de control y asistencia humanitaria. Participan entes como: los Bomberos, Cruz Roja, Cuarto Batallón, Segundo Batallón Verde, Fuerza Aérea, entre otros.
Pico Bonito, una alternativa
La Ceiba es conocida por sus imponentes playas, su hermoso muelle y la vida nocturna que ofrece. Sin embargo, también es la puerta de entrada a algunos de los paisajes naturales más impresionantes de Honduras.
El Parque Nacional Pico Bonito es un destino imperdible para el Feriado Morazánico. Ubicado a unos 30 minutos de La Ceiba, es uno de los atractivos que ofrece una combinación única. Cultura, naturaleza y festividades, se mezclan en este maravilloso paraje.
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Este parque alberga una variedad de especies de aves, mariposas y mamíferos, y es un lugar ideal para el senderismo y la observación de la naturaleza.
Asimismo, otra opción es el Parque Nacional Cuero y Salado, famoso por sus manglares y la posibilidad de avistar manatíes y diversas aves.
Gastronomía Local
La Ceiba también destaca por su variada y deliciosa gastronomía. Durante el feriado, los visitantes pueden disfrutar de platos típicos como el pescado frito, la sopa de caracol y las baleadas, que son un clásico de la cocina hondureña.
No hay que dejar atrás que se celebran ferias gastronómicas que ofrecen una muestra de la riqueza culinaria de la región, lo que permite a los turistas degustar productos locales y frescos.