Redacción. Casi seis millones de personas tienen problemas relacionados con la vivienda en Honduras, según estadísticas manejadas por la organización no gubernamental Hábitat para la Humanidad Honduras.
Esta cifra representa el 61.9% de las familias y el problema se presenta con mayor prevalencia en las principales ciudades como Tegucigalpa, San Pedro Sula o La Ceiba, según manifestó a Diario Tiempo, Martha Guillén, directora ejecutiva de esta organización.
«Es preocupante porque cada año, en vez de reducirse, aumenta el porcentaje. Todo eso pasa por no tener en Honduras un ente regulador para la vivienda», expresó.
Guillén, además, considera de mucha utilidad que el gobierno dé el primer paso y nombre una institución que se encargue de este tipo de problemas, pues al hacerlo, dijo, se beneficiaría a miles de personas.
Construir casas
En ese sentido, expuso que para combatir el el problema se deben construir más de un millón 600 mil viviendas, de las cuales un millón deben ser nuevas y las restantes 600 mil deben mejorarse.
Esta situación desnuda la realidad de las familias más desfavorecidas, ya que el 19.5% de las viviendas ni siquiera tienen acceso a energía eléctrica y alrededor de 585 mil apenas tienen piso de tierra.
«En San Pedro Sula, más o menos tenemos una necesidad de 130 mil viviendas, y en la capital un promedio de 250 mil casas«, explicó.
Guillén, además, añadió que en total hay más de 2 millones 500 mil hogares en Honduras que padecen al menos uno de los problemas mencionados.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE), en Honduras hay 2,544,629 viviendas y 2,613,199 hogares. De esas cifras, el 9.4% están en condiciones de hacinamiento.
Entre los problemas que afectan a muchas personas están la falta de electricidad, escasez de saneamiento y no acceso a agua potable, entre otros.
Soluciones a corto y largo plazo
La directora de Hábitat Honduras manifestó que existen diversos mecanismos que pueden servir para contrarrestar la problemática de los hogares hondureños.
En tal sentido señaló que las autoridades municipales no tienen ejidos (campo común de un pueblo, lindante con él, que no se labra, y donde suelen reunirse los ganados o establecerse las eras), lo que dificulta el panorama para muchas familias.
En primer lugar, recomendó crear un banco de tierra, ya que muchas personas no tienen la oportunidad de adquirir un terreno en una zona estable y segura.
Como segunda propuesta, instó a que se construyan hogares de manera vertical, debido a la escasez de tierra.
En tercer lugar, Guillén recomendó una urbanización; es decir, apoyar a la población de zonas lejanas o dispersas, las cuales han construido sus casas con sus propios esfuerzos.
Otro mecanismo que podría mejorar la situación sería atender el déficit cualitativo, algo que muchas veces es ignorado por las autoridades.
«Normalmente, todos los programas y proyectos del gobierno se han destinado a la vivienda nueva, pero no estamos atacando el principal déficit», aseveró Guillén.
«La vivienda no lo es todo»
Otra sugerencia que Martha Guillén puso sobre la mesa es no solo enfocarse en las viviendas, sino también ayudar a generar ingresos a las familias. «Si las familias no tienen ingresos, no podrán pagar sus casas», acotó.
Por otra parte, está el tema de la vivienda resiliente, pues se debería innovar al momento de construir las casas. Al respecto, Guillén alegó que hay que tomar en cuenta varios aspectos, como el lugar y el cambio climático, antes de iniciar los planos para la construcción de una vivienda.
En tal sentido, evidenció que hoy en día no deben construirse las viviendas sin hacer una previa investigación de la zona.
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Hábitat para la Humanidad Honduras es una asociación civil privada de desarrollo, sin fines de lucro. La organización tiene más de 30 años de presencia en el país.
“Con los años Hábitat para la Humanidad Honduras ha atendido diversas necesidades, entre ellas las de acceso a terrenos y a viviendas adecuadas para las familias de escasos recursos, todo esto a través de créditos con cuotas y plazos accesibles”, finalizó Guillén.
Hasta la fecha, el ente ha beneficiando a más de 180 mil hondureños y un promedio de 3,000 soluciones habitacionales se construyen cada año.