Por Luis Destephen
Tegucigalpa.- La derogación de la Ley Seca Dominical aprobada hace unos meses por el Congreso Nacional entró en vigencia tras su publicación en el Diario Oficial La Gaceta, aunque los legisladores han dejado a discreción de las municipalidades del país la posibilidad de mantener o establecer los horarios restrictivos para la venta de bebidas alcohólicas el día de descanso.
Argumentando que los índices delincuenciales del fin de semana tenían relación con la ingesta de alcohol, la medida de la Ley Seca Dominical se implementó hace unos dos años, aunque en el caso de Tegucigalpa, pero fue derogada recientemente bajo el argumento de que ya se superaron las circunstancias que obligaron al Poder Legislativo a establecerla.
Los dueños de bares y restaurantes de la ciudad capital, que promovieron el cambio de medida, confirmaron la entrada en vigencia de la derogatoria, pero indicaron que ahora la traba está en que el Congreso Nacional dejó a las corporaciones municipales la posibilidad de que puedan establecer las restricciones de horarios.
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Debido a esto, el horario de prohibición para la venta de alcohol en la capital del país, sigue siendo el día domingo desde las 5 de la tarde hasta las 6 de la mañana del lunes.
Los empresarios de la industria sin chimeneas, que consideran absurdo que un turista no pueda tomarse un trago en ningún lugar el domingo debido a la medida, lamentan que la alcaldía capitalina mantiene el mismo horario de restricción, lo cual afecta de manera directa sus negocios, a sus empleados y a la ciudad como destino turístico.
El presidente de la Asociación Gastronómica de Honduras, Félix García expresó que si los alcaldes atienden la derogatoria «definitivamente aumentaría los ingresos para los negocios, los empleados y los relacionados directamente con el rubo».
«En estos días que están bien difíciles, en esta economía tan deprimida, no nos caería mal levantar nuestras ventas, si nosotros ganamos, los empleados ganan, es una cadena, o los taxistas que transportan al empleado, se estimula un poco la economía del país”, añadió García.
El mayor problema que se presenta es con los extranjeros, que al realizar sus visitas a distintos locales después de las cinco de la tarde, se llevan con la sorpresa que no se les puede vender alcohol, añadió
García agregó que “Como creen que estamos en la capital de un país y venga un turista, quiere salir a cenar y no puede tomarse una copa de vino o una cerveza nacional, el extranjero desea probar siempre el producto local”.
“El extranjero no entiende, si me pongo a explicarle eso de la ley, ellos quedan diciendo que este país no sirve, o que leyes más estúpidas de este país”, relata.
La sugerencia por parte de los dueños de negocio de Tegucigalpa es que la alcaldía haga un estudio de las zonas más peligrosas y establecer horarios acorde al riesgo de cada sitio.
“En lugares peligrosos como el Centro o Comayagüela si se debe dejar esta ley, pero que si sepa la Alcaldía identificar las zonas turísticas para trabajar”, finalizó Félix García.
La sanción económica que se impone al que incumpla el horario de la Ley Seca Dominical va desde cinco mil hasta 15 mil lempiras.
