FARÁNDULA. La controversial hondureña que reside en Estados Unidos, Wendy Tejada, confesó que está arrepentida de haber migrado al país norteamericano, pues la vida es bastante complicada.
La compatriota se encontraba en un en vivo en TikTok, charlando con una amiga que le estaba interrogando sobre su vida en suelo americano. Wendy, con un rostro decepcionado, afirmó que la situación en EEUU no es tan bonita como muchos lo piensa, pues en realidad es difícil el trabajo, sobre todo para los que tienen hijos.
«Ni lo quiera Dios, es bien complicado vivir aquí con niños, ahorita no tengo trabajo», expresó la oriunda de Lempira.
Tejada, además, confesó que se arrepiente de haber salido de Honduras ya que en EEUU solo se trabaja para pagar los gastos básicos. «Sí, me arrepiento. Es que aquí es poca la gente que aguanta estar con niños y solo para eso trabaja uno acá, solo para pagar, para vivir nada más. Sí yo me voy de acá no vuelvo, yo no vuelvo a Estados Unidos«, aseguró.
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Luego de una complicada relación amorosa con Herminio Juárez, en 2019, Wendy migró a Estados Unidos junto con su pequeña hija. Estando en el país norteamericano se enamoró de otro migrante con quien tuvo otra hija y ahora Wendy y sus pequeñas viven en Texas con una amiga.
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Acusan a Wendy Tejada de haberse robado un IPhone en EEUU
Mediante redes sociales, dos mujeres acusaron a la hondureña Wendy Tejada de haberse robado un iPhone 14.
Según se conoce, el celular está valorado en 900 dólares (unos 22 mil 500 lempiras). Las mujeres aseguraron que ayudaron a la hondureña en su estadía en Estados Unidos. Sin embargo, señalaron que Teja se mostró «humilde y después sacó las uñas».
En ese sentido, doña Marlene le ayudó a la catracha para tener un iPhone 14 sacándolo en una compañía a su nombre. La señora pagó tres meses y después le pidió a Tejada que le pagara ese dinero y que siguiera pagando el resto.
Marlene dijo que la hondureña le respondió que desconectara el celular porque ni servía y luego la bloqueó.
Wendy Tejada, por su parte, dijo que desde que sacó el celular comenzó a pagarlo y que doña Marlene estaba enojada.
«Yo desde que lo saqué lo empecé a pagar y había pagado la mitad cuando lo saqué y lo estaba pagando y ella diciendo que yo me lo había robado», aseguró la catracha.