FITO MOLINA/Segunda parte
SAN PEDRO SULA. La Cruz Roja Hondureña de San Pedro Sula es una institución llenada de historias vividas por sus voluntarios durante diferentes etapas de su existencia.
Uno de los motoristas rememoró que junto a su compañero Carlos Patiño, el “negro” Quimichu (QDDG), y su director Omar Suazo, que hace poco falleció, les tocó trasladar a los soldados heridos a los hospitales militares durante la guerra contra El Salvador.
«En una ocasión cuando asistían a unos lesionados en el parque de Ocotepeque, escuchamos las ráfagas de metralla y las explosiones de las balas de morteros tan cerca que pensamos que nos había llegado la hora», recuerda.
También recordó que le tocó trabajar hora tras hora en el Fifí, donde junto a bomberos y miembros del ejército, tuvieron que incinerar a muchos muertos en una fosa común.
“Ese episodio perduró en mi mente por muchos días”, dijo el conductor.
Igualmente habló de lo ocurrido en la tormenta Gert y el Mitch que dejó enormes desgracia en el país.
Internacionalmente dijo que había estado asistiendo con otros compañeros los afectados por el terremoto en El Salvador y Guatemala.
Al referirse al trabajo que realiza en la ciudad, dijo que nunca ha tenido ningún percance al trasladar a personas enfermas o heridas hacia los hospitales o clínicas privadas.
» Lo único que nos ha sucedido es que se ha ponchado la ambulancia!», señala y se ríe.
ASI NACIO LA CRUZ ROJA
La Cruz Roja nace en Ginebra de la mano de un comerciante llamado Henry Dunant, quien por negocio se encontraba el 24 de junio de 1859 muy cerca de la ciudad de Solferino, en el norte de Italia, en ese mismo día el ejército austríaco se enfrenta con el francés y el piamontés.
El enfrentamiento deja al menos unos 40.000 muertos y heridos tendidos en total confusión en el campo de batalla. Allí observó cómo los lastimados quedaban desatendidos y morían por falta de asistencia.
Cuatro años después del enfrentamiento, Dunant junto al general Guillaume Henry Dufour, Gustave Moynier y los Doctores Louis Appia y Theodore Maunoir, lograron reunirse por primera vez en febrero de 1863 para constituir un organismo autónomo que adoptó el nombre de Comité Internacional de Socorros a los Heridos, esta entidad fue conocida posteriormente como Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
