Redacción. Vorasack Phommasith, de 46 años y originario de Laos, enfrenta la deportación después de haber vivido, estudiado y trabajado en Estados Unidos durante más de cuatro décadas. Su situación actual es precaria, como él mismo describe a Newsweek: «No vivo bien y no puedo llevar una vida normal como antes. Necesito ayuda con dinero para al menos empezar una nueva vida donde sea».
Su historia en EE. UU. comenzó en 1980, cuando llegó con su familia como refugiados, huyendo de las secuelas de la guerra de Vietnam. Nacido en un campo de refugiados, Phommasith creció en Springfield, Massachusetts, donde asistió a la escuela y trabajó como operador de máquinas en la industria manufacturera.
Aunque nunca obtuvo la ciudadanía estadounidense, siempre residió legalmente en el país, primero como refugiado y luego como titular de una green card. Su padre había servido en el ejército real de Laos, luchando contra las fuerzas comunistas antes de que la familia escapara.
Historial delictivo
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha detallado que Phommasith posee un extenso historial delictivo, con condenas por distribución de cocaína y marihuana, agresión y alteración del orden público.
La subsecretaria adjunta del DHS, Tricia McLaughlin, declaró a Newsweek: «Vorasack Phommasith es un inmigrante indocumentado de origen laosiano que llegó a EEUU desde Tailandia.
Tiene un extenso historial delictivo, que incluye condenas por distribución de cocaína y marihuana, agresión y alteración del orden público». McLaughlin afirmó que «hace más de una década», un juez de inmigración ordenó la expulsión de Phommasith de EE. UU. y que él «renunció su derecho a apelar».

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«Con el presidente (Donald) Trump y la secretaria (Kristi) Noem, si infringes la ley, enfrentarás las consecuencias. Los extranjeros delincuentes no son bienvenidos en EEUU», resaltó la subsecretaria del DHS.
En 2013, Phommasith fue detenido tras cumplir una condena por violar la libertad condicional relacionada con un delito de drogas. Posteriormente, un tribunal de inmigración en Boston emitió una orden final de expulsión y revocó su green card. Aunque lo liberaron bajo supervisión, permanece bajo esa orden de expulsión debido a que Laos, el país al que sería enviado, actualmente no acepta deportados.
Política Migratoria
La situación de Phommasith refleja una tendencia más amplia en la política migratoria estadounidense, especialmente bajo la administración de Donald Trump, que ha impulsado lo que denomina la mayor operación de deportación en la historia del país. Esto ha incluido la detención no solo de personas sin estatus legal, sino también de inmigrantes con documentación válida, como titulares de green card y visados.
Actualmente, Phommasith se encuentra en una situación de limbo legal. Sin identificación válida, no puede trabajar ni conducir y no logra renovar sus documentos vencidos porque carece de un certificado de nacimiento. Además, afirma estar sin hogar y tener dificultades para cuidar de sus tres hijos estadounidenses mientras busca asistencia legal. «He cumplido mis condenas y todas mis sentencias tienen más de 10 años», declaró a Newsweek.

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Arresto
El caso de Phommasith no es único. En el pasado, el medio reportó sobre Lewelyn Dixon, una titular de green card que llegó al país desde Filipinas hace 50 años y que fue detenida por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) en Washington a principios de abril. Emily Cristobal, sobrina de Dixon, confirmó su arresto y posterior traslado al Centro de Detención del ICE del Noroeste. Hasta entonces, su familia no había sido informada sobre el motivo de la detención.
Benjamín Osorio, abogado de Dixon, dijo que su clienta tenía una sola condena que se remonta a 2001 y la identificó como el detonante del problema. Esta se trata de una condena no violenta por malversación de fondos y por la cual «recibió 30 días en un centro de reinserción social y una multa de 6.400 dólares».