Redacción. La creciente ola de violencia contra la niñez y la juventud en Honduras se ha convertido en un fantasma que preocupa a varios organismos y sectores del país, por lo que se requieren acciones para mermar ese fenómeno social.
La coordinadora de la Defensoría de la Niñez del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), Cándida Maradiaga, destacó la gravedad de la situación y urgió a las autoridades del país a implementar medidas preventivas para salvaguardar la integridad física y la vida de los niños y adolescentes.
Maradiaga calificó de «altamente preocupante» el aumento de la violencia dirigida a este sector vulnerable de la población, subrayando que el país se encuentra en un nivel crítico respecto a la protección de los derechos de la niñez.
La defensora resaltó que los espacios tradicionales que deberían proteger a los niños, como la familia, la escuela y la comunidad, se han convertido en ambientes de violencia, lo que impide que los menores crezcan y se desarrollen en condiciones óptimas.
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Prontitud
En ese sentido, Maradiaga hizo un llamado a las autoridades encargadas de las políticas públicas sobre niñez para que tomen decisiones firmes y coordinen esfuerzos interinstitucionales que den respuestas efectivas a la violencia infantil.
La prevención en las comunidades y la sensibilización familiar sobre la protección de los derechos de los niños son esenciales para enfrentar esta crisis.
Más incidencias
Aunque la violencia contra la niñez se extiende a todo el territorio nacional, Francisco Morazán y Cortés son identificados como los lugares de mayor riesgo, con altas tasas de incidencia de muertes y agresiones hacia este sector vulnerable.
Estos departamentos han sido señalados como focos críticos de violencia, donde niños y jóvenes enfrentan una amenaza constante a su seguridad.
La violencia contra la niñez en Honduras se manifiesta de varias formas:
- Maltrato infantil
- Explotación sexual
- El reclutamiento forzado por maras y pandillas
- La trata de personas.
El Conadeh pidió un enfoque integral y urgente para proteger a la niñez y juventud hondureña. Destacó la necesidad de acciones preventivas y sanciones efectivas contra los responsables de estos crímenes, con el fin de frenar la violencia.
