Redacción. La Policía Nacional confirmó este miércoles nuevos detalles sobre el ataque armado ocurrido en la carretera hacia el municipio de Santa Ana de Yusguare, Choluteca, en el que dos hermanas resultaron gravemente heridas.
En este trágico hecho también un supuesto sicario murió abatido a balazos por el padre de las afectadas y el conductor del vehículo fue detenido por su presunta implicación en delitos previos.
De acuerdo con el oficial Richard Gallo, vocero de la Policía Nacional en Choluteca, la investigación preliminar indica que el violento hecho se originó por una disputa territorial entre dos bandas criminales identificadas como “Los Pelones” y “Pelones Nueva Generación”, ambas con historial en actividades ilícitas como tráfico de drogas y extorsión en el sur del país.
«Las últimas investigaciones indican que este hecho estaría vinculado a un conflicto territorial entre dos bandas criminales. En este momento, se están recabando más datos para esclarecer la situación en las próximas horas», detalló el agente Gallo.
Las autoridades detallaron que dos sujetos a bordo de una motocicleta ejecutaron el atentado, interceptando un vehículo turismo.
Uno de los atacantes fue atropellado por el conductor del turismo después de resultar herido, lo que causó su muerte en el lugar. El otro logró escapar.
Historial delictivo del abatido
Al fallecido lo identificaron como Osvaldo Eduardo Hernández Cervellón, de 21 años, residente en el barrio Guapinol, Santa Ana. Contaba con un amplio historial delictivo: detenido por tráfico de drogas en 2022 y tres veces más en 2023 y 2024 por violaciones a la Ley de Convivencia Ciudadana.
Las víctimas del atentado fueron las hermanas Emisen Darlenis Montenegro Ferrero (21) y Fabiola Michelle Montenegro Ferrera (24), ambas originarias del municipio. También, resultó herido Guindaví Osorio Sevilla (35), conductor del vehículo en el que se transportaban.
La Policía detuvo al otro involucrado en el atentado horas después debido a su extenso prontuario: en 2018 lo arrestaron por extorsión; en 2022, lo capturaron por tráfico de drogas, robo de vehículos, tenencia ilegal de armas, atentado contra autoridades y usurpación de identidad.
Aunque lo pusieron en libertad en su momento, aparentemente estaba bajo medidas cautelares al momento del ataque.
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La Policía no descarta más capturas en las próximas horas, ya que este caso podría ser solo una muestra del conflicto entre facciones criminales que se disputan el control territorial en la zona sur del país.
