REDACCIÓN. El dolor y la indignación embargan a la familia y amigos de Eduar Leonel Mejía Dubón, un joven taxista VIP de 27 años que fue asesinado a sangre fría el pasado sábado en el barrio Las Palmas de San Pedro Sula, tras una acalorada discusión con otro conductor.
El crimen ocurrió alrededor de las 5:00 de la tarde. Según testigos, Mejía Dubón se encontraba dentro de su vehículo atendiendo una llamada telefónica, cuando un camionero enfurecido se aproximó. Tras bajarse de su vehículo, el agresor desenfundó un arma de fuego y disparó en al menos siete ocasiones contra el joven, quien murió al instante, sin posibilidad de defenderse. El atacante huyó del lugar, mientras que agentes de la Policía Nacional y personal de Medicina Forense llegaron minutos después para iniciar las investigaciones correspondientes.
Hasta el momento, las autoridades no han identificado ni capturado al responsable del crimen, lo que ha generado más angustia entre sus seres queridos, quienes exigen justicia. “Era un joven lleno de sueños, siempre amable, respetuoso y con temor de Dios. No merecía morir así”, expresó entre lágrimas un familiar cercano durante el velorio.
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Eduar Leonel era originario de Santa Rosa de Copán, pero residía desde su infancia en San Pedro Sula. Era el único hijo varón entre tres hermanos y se destacaba por su carácter alegre y jovial. Había estudiado mecánica, pero su pasión era el servicio: tanto en su trabajo como conductor VIP como en la iglesia Ebenezer, donde fue un servidor activo durante su juventud.
“Ese día solo salió a taxear, dijo que era un buen día para trabajar”, relató una tía mientras lo velaban en medio de oraciones y súplicas por justicia. Para su familia, Eduar no solo lo consideraban un trabajador esforzado, sino también “el orgullo del hogar y un verdadero servidor de Dios”.
El caso ha generado conmoción entre vecinos y conocidos, quienes recuerdan a Eduar como un joven ejemplar. Mientras tanto, sus seres queridos piden que su muerte no quede impune y que el responsable responda ante la justicia.