EUROPA.- Luego de casi tres meses, la UEFA decidió suspender al árbitro rumano, Sebastian Coltescu, por el incidente que ocasionó en el juego entre el PSG vs Basaksehir por la fase de grupos de la UEFA Champions League.
Durante dicho juego, el árbitro se refirió a un jugador como «ese negro», frase que desencadenó la furia de todos los jugadores y cuerpos técnicos en el partido, debido a eso el juego debió suspenderse y jugarse un día después.
No obstante, esta decisión por parte de la UEFA ha causado aún más polémica, ya que a Coltescu se le sancionó por conducta inapropiada aludiendo que irrumpió el artículo 11.1 (obligación de comportarse de manera adecuada) y no por infringir el artículo 14 (racismo y discriminación).
«En el contexto internacional, el uso correcto del lenguaje es esencial para evitar situaciones como las ocurridas en el partido mencionado», explicó el organismo mediante un comunicado.
De esta forma, el silbante rumano queda suspendido por el resto de la temporada y deberá asistir a un programa educativo antes del 30 de junio de 2021 en las condiciones determinadas por los servicios arbitrales de la UEFA.
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