Redacción. La Comisión Europea (CE) y el jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, reafirmaron este domingo el compromiso de poner fin a la violencia contra las mujeres y a la vez señalaron que es «una prioridad fundamental».
«Nuestro compromiso de poner fin a la violencia contra las mujeres en todo el mundo es una prioridad fundamental de la acción exterior de la UE, en particular en lo relacionado con el papel de la UE como principal donante humanitario», indicó el Ejecutivo comunitario y Borrell en un comunicado conjunto con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se celebra el 25 de noviembre.
Subrayaron la «firme dedicación» de la UE para la erradicación «inmediata» de la violencia contra las mujeres y las niñas en colaboración con los países socios, la sociedad civil, los grupos de defensa de los derechos de las mujeres y los defensores de los derechos humanos.
La Comisión y el alto representante señalaron que «todas las formas de violencia contra las mujeres son despreciables». «Constituyen una violación de los derechos humanos y debilitan nuestros valores fundamentales», agregaron.
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Violencia contra las mujeres
La Comisión se adhirió en octubre de 2023 al Convenio del Consejo de Europa sobre Prevención y Lucha contra la Violencia contra la Mujer y la Violencia Doméstica (Convenio de Estambul).
Después de ese convenio, que fija estándares «más ambiciosos y exhaustivos» para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica, en mayo de este año, la Unión Europea adoptó la Directiva sobre la lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica.
El objetivo de dicha Directiva es facilitar un marco integral para prevenir y combatir eficazmente la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica. Es decir, introduciendo definiciones de determinados delitos; entre ellos: ciberviolencia, mutilación genital femenina y matrimonio forzado. También, reforzando la protección y el apoyo a las víctimas, facilitando su acceso a la justicia y mejorando la prevención.
En ese sentido, la UE indicó que ahora se dispone de más herramientas para combatir esa violencia, tanto en línea, como fuera de línea. Lo anterior, con el fin de garantizar que las mujeres y niñas «puedan sentirse seguras y vivir sin temor. Además, de prestar servicios de apoyo específicos a las víctimas y de hacer rendir cuentas a los autores».
Finalmente, Borrell y la CE pidieron a todos los Estados miembros que «apliquen rápidamente estas medidas rigurosas».
