AFP. «Tenemos muchos malos genes en nuestro país», afirmó el expresidente y candidato republicano a la Casa Blanca Donald Trump sobre cientos de millas de migrantes, tras decir que «envenenan la sangre» estadounidense y comen mascotas.
Al igual que en la campaña electoral de 2016, la migración irregular por la frontera con México es el tema predilecto de Trump, cuya retórica parece radicalizarse a medida que se acerca la fecha de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
En una entrevista con el programa de radio The Hugh Hewitt Show, difundida este lunes, Trump acusó a su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, de 59 años, de haber permitido la entrada de «asesinos».
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«¿Qué le parece permitir la entrada de personas a una frontera abierta? Al menos 13,000 eran asesinos, muchos de ellos asesinaron a mucho más de una persona», comentó. «Ahora viven felices en Estados Unidos».
A finales de septiembre el congresista republicano Tony Gonzales difundió una carta con cifras del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE en inglés), según la cual habría 425,000 migrantes con condenas penales que viven en libertad en el país, incluidos más de 13,000 condenados por homicidio.
Trump, de 78 años, usa estas cifras para estigmatizar a los migrantes y asegura que entraron en el país durante el mandato de Joe Biden.
En realidad, según el Departamento de Seguridad Interior (DHS), los datos «se remontan a décadas atrás» y algunos entraron en el país «en los últimos 40 años».
«No deberías estar aquí»
«Sabes, un asesino, yo lo creo, está en sus genes», declaró en la entrevista de radio. «Tenemos muchos malos genes en nuestro país en este momento», añadió.
«Han entrado en nuestro país 425,000 personas que no deberían estar aquí y que son criminales», sostuvo Trump. El mismo Donald Trump, quien desde principios amenaza con una deportación masiva si gana los comicios.
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En su rueda de prensa diaria, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, fustigó este lenguaje porque «es odioso, es repugnante, es inapropiado».
«No tiene cabida en este país», recalcó sobre las palabras de Trump, quien también se ha hecho eco del bulo de que migrantes haitianos de una localidad del estado de Ohio roban mascotas para comérselas.