ESTADOS UNIDOS. El presidente Donald Trump expresó esta mañana sus condolencias a las víctimas de la peor masacre por tiroteo en la historia del país.
«Mis más sentidas condolencias y simpatías a las víctimas y familiares de este terrible tiroteo en Las Vegas. ¡Que Dios los bendiga!”, escribió en su cuenta de Twitter.
Un funcionario de la Casa Blanca señaló que, a raíz del incidente, el viaje del presidente norteamericano a Puerto Rico este martes, se encuentra “bajo revisión”. El presidente comienza a afrontar así con desconcierto la peor masacre de ciudadanos estadounidenses causada por un tirador en Estados Unidos.
La cantidad de muertos ya supera a la de la discoteca Pulse de Orlando, en julio de 2016, donde un musulmán estadounidense con dudas sobre su identidad sexual mató a 49 personas en el bar gay, una matanza luego reivindicada por Ejército Islámico.
Esta madrugada, un hombre identificado como Stephen Paddock disparó a quemarropa desde el piso 32 de un hotel contra una multitud que disfrutaba al aire libre de un concierto de música country y mató al menos a 50 personas e hirió a unas 400 en Las Vegas.
La policía cree que Paddock, que es un residente local, fue un “lobo solitario” y no ha dado detalles. “No sabemos cuál es su sistema de creencias”, agregaron, pero comentaron que el hombre, de 64 años, tenía un pequeño arsenal en la habitación. El apellido, de cuna irlandesa, está lejos de el del matador de Pulse Omar Saddiqui Mateen (de origen afgano) o de Syed Farook y Tashfeen Malik (paquistaníes), los autores de la matanza de San Bernardino (14 muertos) en 2015.
Este hecho desconcierta a Trump, que ha basado su campaña electoral y buena parte de su gobierno denostando a los musulmanes, al punto de llegar incluso a prohibir el ingreso de ciudadanos de varios países de mayoría islámica porque eran “sospechosos de terrorismo”, una medida trabada en la justicia por “discriminatoria” y anticonstitucional. ¿Cuál será el discurso de Trump ahora, que aparentemente no tiene a musulmanes a quién culpar?
TERROR EN LAS EGAS
Tiroteo en Las Vegas: habló el músico que siguió cantando mientras el asesino disparaba
No se saben aún los detalles de la vida y las ideas de Paddock, pero sí que portaba un rifle semiautomático que permite disparar ráfagas de balas sin volver a cargar, un arma de guerra que es potencialmente mucho más letal porque puede asesinar a más gente en menos tiempo. Los defensores del control de armas buscan prohibir desde hace años los semiautomáticos porque lo consideran demasiado peligrosos para que cualquier habitante lo tenga en su casa. Nada, ni siquiera la Segunda Enmienda, justifica que una persona tenga uno en el ropero, argumentan.
Pero Trump es un ferviente defensor del uso de armas, incluso en la campaña electoral ha revelado que tanto él como sus hijos son propietarios de varias. La poderosa Asociación Nacional del Rifle lo ha apoyado fervientemente en su postulación e incluso uno de sus líderes, Chris Cox, habló en la Convención Nacional Republicana que ungió a Trump como candidato.
La matanza de Las Vegas desconcierta a Trump. No tiene por ahora un enemigo sencillo de identificar, a quién disparar sus virulentos tuits. El asesino es un ciudadano estadounidense, blanco, de 64 años, del interior del país. Podría ser tranquilamente uno de sus votantes.
