Redacción. El presidente Donald Trump afirmó este 24 de junio que China podrá continuar comprando petróleo a Irán, en medio de las conversaciones sobre el comercio energético internacional.
«China ahora puede seguir comprando petróleo de Irán. Espero que también compren bastante de Estados Unidos», escribió Trump en su publicación. Con esta declaración, el mandatario dejó entrever que se suavizarían las sanciones impuestas a Irán, lo que representa un cambio relevante en la política energética global.
La noticia tuvo un efecto inmediato en los precios del crudo. De acuerdo con la agencia AFP, el referencial Brent del mar del Norte cayó un 4.50%, cerrando en 68,26 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) se desplomó un 4.60%, situándose en 65,34 dólares. Esta baja se atribuye a una percepción de estabilidad en el suministro petrolero, especialmente ante las tensiones recientes en Medio Oriente.
Irán y el Estrecho de Ormuz
La importancia de Irán en el mercado energético es clave. Se trata del tercer país con mayores reservas de petróleo en el mundo, con una capacidad de producción cercana a 4 millones de barriles diarios. Además, Irán controla el Estrecho de Ormuz, un paso marítimo estratégico por el que transita más del 20% del petróleo mundial. Cualquier amenaza de cierre de esta ruta incrementa el nerviosismo global sobre el suministro de crudo.
En este contexto, el mensaje de Trump fue recibido como un intento de tranquilizar los mercados, aunque con reacciones mixtas.
Anuncio de alto al fuego
Otro elemento que influyó en la moderación de los precios del petróleo fue el anuncio de un «alto al fuego total y completo» entre Israel e Irán, revelado por Trump ayer lunes 24 de junio. Según el mandatario, el acuerdo pondría fin oficialmente a los 12 días de guerra entre ambos países.
«Ha sido plenamente acordado por y entre Israel e Irán que habrá un ALTO EL FUEGO TOTAL y COMPLETO», escribió en Truth Social.
Sin embargo, la tregua fue rápidamente puesta en duda. Minutos después del anuncio, Israel denunció un ataque con misiles por parte de Irán, mientras que Teherán negó haber disparado y acusó a Israel de violar el acuerdo al bombardear su territorio.
Esta incertidumbre geopolítica mantiene alta la tensión internacional, y con ella, la inestabilidad en los mercados petroleros.