1. Poniendo cubitos de hielo en tus bebidas fuerzas al cuerpo a calentarse, con lo que quemarás más calorías.
2. Normalmente tendemos a usar vasos bajos y anchos. En su lugar, bebe en largos y estrechos.
3. Mantén alejados los aperitivos. Si no los tienes a la vista, te resultará mucho más fácil no acordarte de ellos y, por consiguiente, no comerlos.
4. Los alimentos más grandes te satisfarán más, así que prepara un poco de ensalada junto a tu minibocadillo para que te parezca más grande.
5. A mayor variedad en la mesa, más comerás, por lo que céntrate en dos o tres alimentos (no valen patatas fritas, pizza y pollo).
6. Si pudieras ver todo lo que has comido, es mucho más probable que pares. Si tomas snacks, ve guardando los envoltorios.
7. Integra el elemento más saludable en tu primera comida.
8. Si tienes un antojo de comida, masca un chicle o cepíllate los dientes. Se te quitarán las ganas al instante.
9. Cuando comas fuera de casa, intenta masticar bien y lo más lentamente posible. Y recuerda que la comida basura, como patatas fritas o hamburguesas, se deshace enseguida en la boca, al contrario, por ejemplo, que lechuga.
