Totti confiesa: «No fui al Madrid por mi mujer»

0
757
Football Soccer - AS Roma v Genoa - Serie A - Stadio Olimpico, Rome, Italy - 28/5/17 AS Roma's Francesco Totti plays with a ball after his last game. REUTERS/Alberto Lingria FOR EDITORIAL USE ONLY. NO RESALES. NO ARCHIVES

Roma, Italia.- Es lo que pasa con Francesco Totti, mito viviente de la romanidad, que vuelve a contar sus experiencias con su particular gracejo.

El italiano pasó toda su carrera en la Roma, a pesar de las numerosas ofertas de otros clubes.

A partir de la semana que viene se podrán leer en su autobiografía ‘Un Capitano’, que para que se hagan una idea será presentado con un gran evento en el Coliseo.

Empecemos por aquello de su fichaje frustrado por el Real Madrid. «Decir no fue durísimo, me quedé sobre todo por Ilary (su actual mujer). Habíamos empezado a salir poco antes y a mí las relaciones a distancia no me gustan. Antes o después terminan siempre», cuenta. 

Ilary Blasi, su esposa

Es una popular presentadora del programa Le Iene, el ‘Caiga quien Caiga’ italiano, que todavía sigue en antena. El propio Francesco reconoce que unas navidades vio a la chica por la tele y le dijo a un amigo: «con esta me caso yo». Y efectivamente, le dijo ‘sí, quiero’ a ella y ‘no, gracias’ a Florentino.

La otra gran negativa se la llevó el Milan, también por una mujer. En este caso, como buen romano, por la mamá.

«En aquella ocasión el ‘no’ fue de mi familia, sobre todo de mi madre. Era aprensiva, posesiva y mi padre trabajaba hasta tarde. Siempre estaba detrás de mí, no quería que me alejase. Me quería todo para ella».

Hay que decir que el muchacho tenía entonces sólo 12 años, pero Silvio Berlusconi ya ofrecía entonces 300 millones de liras, o lo que es lo mismo 150.000 euros.

Dos mujeres fueron quienes le impulsaron -o quizás le sirvieron de excusa- para jurarle amor eterno a su Roma, de la que dice que no salió ni a un país exótico ya de retirada para no faltar a su palabra.

Tan apegado a su entorno estaba el chico, que cuando Cassano fichó por la Roma lo tuvo viviendo en casa con sus padres durante cuatro meses. «Le regalaba a mi madre anillos, brazaletes de 5.000 o 6.000 euros, como si fuera su esposa», rememora.

«El magnifico»

Si Totti era tan de barrio que no era capaz de salir del nido ya siendo una estrella, cómo sería Cassano, que aceptó meterse allí también. Dice su amigo del ex del Real Madrid que si lo veía en un restaurante le invitaba a él y a toda la concurrencia, quería «hacer el magnífico».

Finalmente Cassano se fue porque pensaba que la asistenta le había robado un sobre con su sueldo -que después lo descubrió en el asiento de su coche- y Totti porque la devoción era tan grande que sus vecinos le robaban el felpudo para poder llevarse un recuerdo del lugar en el que posaba «su santo pie».

La celebración del Scudetto

Roma es así, no duden de la veracidad. Y en aquellos años llegaron a ganar el Scudetto, por lo que habría que elevar la locura a la enésima potencia.

Aquella noche del título, el tercero de su historia, el capitán salió a festejarlo a un restaurante con la familia y amigos, cuando de pronto se encontró con que 5.000 personas rugían a las puertas del local, intentando entrar para abrazarlo.