SAN PEDRO SULA. Un niño de tan solo nueve años de edad fue encontardo torturado, decapitado y semi-enterrado en la colonia El Paraíso II, del sector Rivera Hernández, zona norte de Honduras.
Según informaron los familiares del pequeño, quien respondía al nombre de Andy Bonilla, él desapareció desde el viernes en la noche. Su cuerpo yacía mutilado en un crique.
«El niño no llegó a dormir, entonces lo anduvimos buscando por todos lados, pero, hoy, la mala noticia es que lo hallamos muerto (…) Su madre está destrozada. Todos lo queríamos», dijo uno de los parientes presentes en el lugar.
Otro menor de edad testificó cuando a Andy Bonilla lo estaban asesinando, y fue él la persona que alertó hasta hoy a la Policía Nacional y a los parientes de la víctima. El denunciante ahora está bajo la cuestiona de las autoridades que investigan el caso como sospechoso. El doliente se refirió a él como un «niño» también.
«El niño que detuvieron vio que lo estaban decapitando, pero él no habló en la mañana porque tenía miedo de que lo mataran también. No lo íbamos a encontrar nunca hasta que el niño nos dijo que él sabía dónde estaba enterrado», agregó el familiar durante una comparecencia con el canal HCH.
Niño testigo lo había amenazado
No obstante, el familiar también aseguró que ese niño informante, anteriormente, había amenazado de muerte al pequeño Andy. «Un día él le dijo que lo iba a matar, pero nos dijo a nosotros que no fue él quien lo mató, sino otro ya ‘más mayor’, más grande». Lo que da un giro inesperado a la investigación de la Policía.
«Son niños que andan aquí en la colonia, que andan descarrilados un poco, y a él ya días lo habían amenazado de que lo iban a matar. El niño pequeño que se llevaron en la patrulla, ese lo amenazó«, agregó el familiar de Andy.
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