Redacción. La ciudad de Tijuana, en la frontera de México con California, se ha convertido este año en el principal cruce irregular de migrantes hacia Estados Unidos, con un promedio de 1 mil 250 diarios, lo que especialistas atribuyen a las crecientes restricciones en Texas.
Tan solo en la última semana de abril, datos de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos registraron más de 9 mil 513 detenciones de personas que intentaron cruzar hacia la ciudad californiana de San Diego. Mientras, en otras regiones, como en Tucson, Arizona, reportaron 7 mil 600.
Según estos datos, en promedio son alrededor de 1 mil 250 cruces diarios los que se dan por esta zona limítrofe. Del lado mexicano comprende desde Playas de Tijuana, donde el muro fronterizo desemboca en el océano Pacífico, hasta el Ejido Jacumé, en el municipio de Tecate.
El efecto de la criminalización de migrantes en Texas
Judith Cabrera de la Rocha, codirectora de Border Line Crisis Center, aseguró a EFE que este incremento de cruces por esta zona ha sido evidente. Esto achaca a las “medidas criminalizantes y de riesgo que han instrumentado Gobiernos como el de Texas».
Entre ellas citó «sus boyas mortíferas» en el río Bravo, lo que ha provocado lesiones y muertes de migrantes, «y las detenciones sin escrúpulo alguno”.
Esto lo ha presumido el gobernador de Texas, el republicano Gregg Abbott. Él destacó que el de este año fue el marzo con la cifra más baja de detecciones de migrantes irregulares en la frontera desde que Joe Biden asumió la presidencia de Estados Unidos en 2021, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés).
«La razón por la que fue el marzo más bajo de encuentros de migrantes es Texas. Los cruces ilegales bajaron un 72 % en Texas mientras que subieron un 24 % en otros estados fronterizos. Continuamos construyendo el muro fronterizo y barreras de alambres de navajas para reducir la inmigración ilegal en Texas», sostuvo en la red X.
Fuente: EFE