Redacción. Despiden a un empleado de Tesla que hasta el 15 de abril había estado trabajando como supervisor de producción en las instalaciones de Fremont, California. Este trabajador había empezado a dormir en su coche y a ducharse en la fábrica para poder laborar más horas.
A raíz de su despido, Nico Murillo decidió publicar su historia en LinkedIn. Según sus versiones, a las 4:30 a. m. abrió su portátil y observó que la cuenta estaba desactivada.
«Pensé que era otro problema informático, así que no le di importancia», detalló. Para su desgracia, cuando miró un correo el mensaje decía lo siguiente: «Desafortunadamente, su puesto ha sido eliminado por esta reestructuración».
Puedes leer: Elon Musk anuncia el despido de unos 15,000 trabajadores de Tesla
Detalles
Decidió enviarle un mensaje a las 5:00 a. m. a su director, quien le respondió fríamente que «todo el mundo lo ha recibido, más tarde tendremos más información». Después, a las 5:50 a. m. intentó entrar en la fábrica, pero el guardia de seguridad se lo impidió al confiscar su tarjeta e informándole de que estaba despedido.
El infortunado, en sus cinco años en Tesla, pasó de un puesto de asociado de producción de nivel básico a uno de asociado de producción principal y terminó como supervisor de producción. Además, con un viaje de 90 minutos de su casa a la fábrica y de la fábrica a su casa, en 2023, al parecer empezó a dormir en su coche, a ducharse en la fábrica y a cocinar en el microondas los días que trabajaba.
Incertidumbre
Días atrás, Elon Musk comunicó que iba a despedir al 10% de su plantilla de Tesla a nivel mundial. Posteriormente, todos los trabajadores quedaron expectantes para saber si eran ellos los elegidos para irse.
Usualmente, cada vez que Musk toma una decisión de esta índole, todo se hace sin orden, ni consentimiento. O sea, no comunica a los colaboradores que despedirán. Además, la seguridad escaneó las tarjetas de los empleados en la puerta para averiguar quién ya no trabajaba en la compañía de coches eléctricos.