Redacción. A solo días de la “Caminata por la Paz y la Democracia”, convocada por las iglesias católica y evangélica, la capital hondureña amaneció este martes con mensajes de rechazo hacia la actividad.
Las pancartas fueron colocadas en puntos visibles como el puente peatonal frente a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y sobre el bulevar Centroamérica —rebautizado como “Resistencia Popular”—. Las mantas contenían imágenes del arzobispo de Tegucigalpa, Vicente Nácher Tatay, y del pastor Gerardo Irías, presidente de la Confraternidad Evangélica. Junto a sus fotografías, se lee en el texto: “Rechazamos el uso de nuestra fe con fines políticos proselitistas”.

Respuesta de la iglesia
Desde las iglesias católica y evangélica, la reacción se ha dado con firmeza y rechazo a las acusaciones. “No nos vamos a detener por amenazas ni por intentos de desprestigio. La caminata es un acto espiritual, no político, y nuestro único objetivo es orar por Honduras”, declararon representantes de ambas congregaciones.
Además, recordaron que la convocatoria es abierta a todos los hondureños y que se llevará a cabo con un espíritu de alegría y unidad.

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Confrontación creciente
La aparición de estos carteles profundiza la tensión entre líderes religiosos y sectores afines al gobierno, recordando campañas de desprestigio recientes contra periodistas y otros críticos.
La caminata partirá a las 2:00 de la tarde desde la Plaza de las Banderas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), en Tegucigalpa. Finalizará en el Estadio Nacional. Las iglesias organizadoras invitan a todas las personas de buena voluntad a sumarse en este recorrido que simboliza el compromiso por un futuro pacífico y democrático para el país.
En su convocatoria, las iglesias destacan que “Honduras nos necesita unidos en oración, porque el futuro de Honduras depende de todos”. Esta frase resalta la importancia del compromiso colectivo en la búsqueda de soluciones a la crisis social.
Pese a las amenazas, obispos, pastores y feligreses aseguran que la actividad se realizará con el objetivo exclusivo de elevar oraciones por Honduras. “Estamos listos para orar por Honduras, y lo haremos con alegría”, reiteraron líderes de ambas iglesias.