SUPERACIÓN: ¡Hondureño que dejó el fútbol se convirtió en ingeniero y triunfa en el levantamiento de pesas!

En aquel año de 1988, a los 22 años dejó al histórico Pumas de la UNAH por seguir al amor de su vida y completar su deseo de convertirse en ingeniero en los Estados Unidos.

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TEGUCIGALPA. –  Su nombre, muy pocos lo recuerdan en el fútbol, sin embargo, en su mente perdurará aquella vez que debutó en la Liga Nacional profesional de Honduras. Su sueño se hizo realidad, debutó en los tiempos duros de la primera división, donde muy pocos esperan llegar. Fue un paso rápido, al final cumplido. Pero aquel “cipote” estaba destinado para otras cosas. Sacrificó su pasión por el fútbol guiado por su sentido de superación.

Su nombre es Wilson Amadis Martínez, nacido en la ciudad de La Ceiba y criado en el Barrio Ingles.

En aquel año de 1988, a los 22 años dejó al histórico Pumas de la UNAH por seguir al amor de su vida y completar su deseo de convertirse en ingeniero en los Estados Unidos.

Ahora Wilson, fabricado para ser un atleta, lo condujo a practicar una disciplina complicada: Levantamiento de Pesas.

Wilson radica en los Estados Unidos y compite en la Categoría Master (Mayores de 40 años) defendiendo la bandera norteamericana, lo cual le ha valido participar en cinco mundiales de Levantamiento de pesas.

Pero, ¿Por qué no compite por Honduras?

A continuación, la entrevista con este hombre de hierro, que dejó el fútbol, por convertirse a la halterofilia.

Wilson, ¿Es verdad que hubo un tiempo en el que jugó fútbol?
Si, antes de salir de Honduras, en el 89 yo jugaba con la universidad en Primera División. Llegué al equipo en el 88, ahí tuve la oportunidad de jugar con grandes figuras.

¿Y qué paso que de la noche a la mañana lo dejó fútbol?
Bueno, lo que sucedió es que también estudiaba en la facultad de ingeniería mecánica en la UNAH, pero lo que sucedió fue que tuve la oportunidad de viajar a Estados Unidos, porque mi esposa fue solicitada por los padres que erradicaban en Nueva York y ella era la única que estaba en Honduras, entonces al darse esa situación pues aproveché la oportunidad de viajar.

¿A los cuantos años decide irse a Estados Unidos, dejar el fútbol y la ingeniería mecánica acá?
Tenía 22 años.

¿Fue duro o fue la mejor decisión?
Fue duro al comienzo, como inmigrante el comienzo fue feo, aquí para sostenerse se trabaja en lo que se encuentre.

¿Siguió estudiando allá?
Sí, mi esposa y yo fuimos a la universidad, ella se graduó de enfermera y yo termine en ingeniería biomédica acá.

Cuéntenos esa nueva faceta, después de ser futbolista en Honduras ahora es levantador de pesas por Estados Unidos ¿Cómo se da eso?
Sí, mi historia como levantador de pesas comienza después de los 20 años, cuando ya no puedo jugar fútbol por una operación de ligamiento cruzado que sufre jugando acá, aquí jugaba en ligas burocráticas y me lesioné la rodilla izquierda, entonces me tocó ir a rehabilitación por la rodilla y en el gimnasio donde yo hacia las terapias asistían grandes levantadores de pesas a nivel mundial, yo tuve la fortuna de verlo, conocerlos y comenzar con ellos, me enseñaron todas las técnicas.

Fui aprendiendo poco a poco, primero localmente, luego estatalmente, luego regionales, después nacionales y hasta donde estoy ahora en las mundiales representando a Estados Unidos. Una vez que te ganas la categoría nacional tienes el derecho de formar parte del equipo de Estados Unidos en los mundiales.

¿Cuántos mundiales lleva hasta la fecha?
He estado en 5 mundiales.

¿Todas representando a Estados Unidos?
Si, esa división me enorgullece por ser el primer hondureño en lograrlo, he logrado ganar en la categoría máster y he ganado medallas de oro, plata y bronce en diferentes levantamientos.

Wilson, ¿Por qué no por Honduras y si por Estados Unidos?
Cuando llegue acá pues me pues me nacionalice, otra cosa es que Honduras no forma de la federación internacional de levantamiento. Creo que a nivel centroamericano sola Costa Rica forma parte de ella.

¿El trato que te dan por representar a Estados Unidos ha sido bueno, no ha tenido ningún tipo de problemas, al contrario, se siente orgulloso?
Si, afortunadamente sí. Si la oportunidad existiera a mí me hubiese gustado representar a Honduras, pero representar a Estados Unidos es una gran experiencia, para eso nos preparamos, tenemos los mejores entrenadores y es una experiencia muy linda.

¿Qué torneo se viene para los próximos meses?
Todos los años competimos en nacionales en mayo, este año toca en el Estado de Washington, es en la ciudad de Seattle y si se clasifica este año el mundial será en Mongolia.

¿Y cómo estas en están esos ánimos para clasificar a Mongolia?
La rodilla me ha estado doliendo la última semana y media, entonces no pudo entrenar de la forma en la que siempre lo hago, pero ya a partir de mañana quiero volver al gimnasio y ver en qué condiciones me encuentro, quedan siete semanas de duro entrenamiento antes de la competencia y si logro entrenar bien en esta semana me sentiré bien en toda la jornada antes del nacional.

Si hacemos una comparación en las pesas y el fútbol ¿Qué es más apasionante?
Una pregunta difícil, porque mi etapa como futbolista era lo máximo, pero ahora levantar pesas me apasiona. Además de levantador soy arbitro y entrenador, le enseño a jóvenes. Estoy bien metido en el deporte, pero son cosas muy diferentes, requieren diferentes tipos de preparación. La determinación en ambos es muy importante, tu como jugador sabes que puedes tener todo el talento; pero si no tienes esa determinación y las ganas de hacer las cosas bien no funciona. Entonces es lo mismo en el levantamiento de pesas. Cuando compites debes olvidarte de todo y concéntrate en lo que vas a hacer.

¿Ha sido fácil representar a Estados Unidos en una competencia con los mejores levantadores del mundo?
Yo diría que es una gran responsabilidad, no solo de representarnos a nosotros mismos, si no por ser latinos y querer salir adelante. Mi pasaporte es de Estados Unidos, pero dice que nací en Honduras. Entonces la gente se da cuenta de eso. Se dice que es ser hondureño, representar a Estados unidos y dar lo mejor que tenemos.

¿Hasta donde espera llegar?
Lo bueno de este deporte es que uno puede llegar a los 60 años y seguir practicando, entonces no va a ser por ahora que te vas a retirar.

O sea, que hay mucho Wilson para rato en este deporte.
Si, por eso es que me apasiona tanto, un detalle importante de este deporte es que nuestra federación nos hace exámenes antidrogas constantemente. Entonces nuestro cuerpo siempre debe estar bajo lo natural. Hay muchas cosas que no podemos digerir, pero eso a la larga nos facilita seguir compitiendo por más tiempo.

LOPM/OJF