Internacional. El número de muertos por los incendios forestales que asolan el área de Los Ángeles (California) aumentó a 16, mientras los equipos luchaban para contener las llamas antes de que se reanudaran los vientos potencialmente fuertes que podrían empujar el fuego hacia algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad.
Cinco de las muertes se atribuyeron al incendio de Palisades y once al incendio de Eaton, informó la oficina del forense del condado de Los Ángeles en un comunicado el sábado por la noche.
El número previo de fallecidos confirmados antes del sábado era 11, pero los funcionarios dijeron que esperaban que esa cifra aumentara a medida que equipos con perros rastreadores de cadáveres realizan búsquedas sistemáticas por cuadrículas en vecindarios arrasados.
Las autoridades han establecido un centro donde las personas pueden reportar las desapariciones. Se teme que los vientos puedan empujar los incendios hacia el Museo J. Paul Getty y la Universidad de California, mientras nuevas advertencias de evacuación dejan a más propietarios en vilo.
Graves afectaciones
Para el sábado por la noche, Cal Fire dijo que los incendios de Palisades, Eaton, Kenneth y Hurst habían consumido aproximadamente 160 kilómetros cuadrados (62 millas cuadradas), un área más grande que San Francisco. Los incendios de Palisades y Eaton abarcaban casi 153 kilómetros cuadrados (59 millas cuadradas).
En una conferencia de prensa emitida en línea el sábado por la noche, Michael Traum, de la Oficina de Servicios de Emergencia de California, afirmó que 150,000 personas en el condado Los Ángeles están bajo órdenes de evacuación. Mientras tanto, hay más de 700 personas refugiadas en nueve albergues.
Equipos de California y otros nueve estados forman parte de un despliegue que incluye 1,354 camiones de bomberos, 84 aeronaves y más de 14,000 efectivos. También incluyen bomberos recién llegados de México, dijo.
Cal Fire indicó que el incendio de Palisades estaba controlado en un 11 %. Por su lado, el de Eaton en un 15 % el sábado por la noche, de modo que la lucha estaba lejos de terminar.
«Las condiciones meteorológicas siguen siendo críticas y se espera otra ronda de vientos fuertes a partir del lunes», dijo Traum.
Luchando para salvar áreas públicas y privadas
Una feroz batalla ocurrió el sábado en Mandeville Canyon, hogar de Arnold Schwarzenegger y otras celebridades cerca de la costa del Pacífico. Allí, helicópteros arrojaban agua mientras el incendio avanzaba ladera abajo. Los bomberos en tierra emplearon mangueras en un intento de repeler las llamas que saltaban mientras el denso humo cubría la ladera cubierta de chaparral.
Christian Litz, jefe de operaciones de CalFire, dijo el sábado que una de las prioridades era el incendio de Palisades que ardía en el área del cañón, no lejos del campus de UCLA. El viernes por la noche se ordenaron nuevas evacuaciones después de que el lado este del fuego se reavivara.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que los fuertes vientos de Santa Ana podrían regresar pronto. Se cree que esos vientos son responsables en gran parte de convertir los incendios forestales en infiernos que arrasaron vecindarios enteros en la ciudad, donde no ha habido lluvias significativas en más de ocho meses.
El incendio también amenazaba con saltar la Interestatal 405 y adentrarse en áreas densamente pobladas en las colinas de Hollywood y el Valle de San Fernando.