Redacción. San Pedro Sula, al norte del territorio nacional, se encuentra bajo alerta por la contaminación y la densa capa de humo presente en la ciudad.
La Secretaría de Gestión de Riesgo y Contingencias Nacionales (Copeco) confirmó que la concentración de contaminación en la región es producto de los incendios forestales.
«Tenemos esta capa de humo sobre la región norte. Vamos a seguir teniendo esa capa de humo», comentó el representante de Copeco.
Altas temperaturas
El representante indicó que esta semana se podrían registrar temperaturas más altas y destacó la importancia de que la población se mantenga hidratada ante las posibles olas de calor.
Le puede interesar: ¿Cómo proteger a los adultos mayores de la contaminación del aire?
También recomendó el uso de mascarilla a las personas que laboran con exposición a la contaminación ambiental.
De acuerdo con el portal IQAir, la calidad del aire en San Pedro Sula se encuentra en «moderada», alcanzando los 86 ICA US. Sin embargo, se espera que con el paso de las horas pueda disminuir más.
Incendios forestales
La temporada seca 2025 ha provocado la devastación de casi 22 mil hectáreas de bosque en Honduras, según informes del Instituto de Conservación Forestal (ICF). Hasta la fecha, se han registrado 643 incendios, afectando principalmente áreas selváticas.
A pesar de la considerable pérdida, la cifra actual representa una reducción significativa en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando más de 237 mil hectáreas fueron consumidas por el fuego.
Del total de siniestros de este año, 469 ocurrieron en bosques y 174 en zacateras y matorrales, lo que impactó directamente la biodiversidad y los ecosistemas hondureños.
Más del 90 % de los incendios son originados por actividades humanas, incluyendo quemas agrícolas fuera de control y actos intencionales. Organizaciones ambientalistas han denunciado la presencia de «criminales del bosque» y la impunidad que perpetúa estos daños anualmente.
Luis Soliz, titular del ICF, advirtió sobre un «98 % de impunidad» en delitos forestales, al enfatizar la urgente necesidad de castigar a los responsables para frenar la continua pérdida de entre 50 mil y 60 mil hectáreas de cobertura forestal cada año en Honduras.