Redacción. La defensa de la ahora occisa fiscal Karen Gabriela Almendárez Herrera detalló en horas de la mañana que siguen realizando inspecciones sobre el hecho ocurrido en 2022, pues todavía están analizando las pesquisas de los supuestos hechores.
Jaime Rodríguez, abogado escogido por la familia de Almendárez, informó que actualmente siguen recolectando pruebas, que serán presentadas en el juicio oral y público que llevarán a cabo en noviembre.
«En su momento dado, la defensa ha presentado recursos de apelación. De hecho, originalmente iba a conocer (el caso) jueces en Tegucigalpa, pero después la Corte Suprema determinó que debían ser jueces de sentencia de Choluteca», expresó Rodríguez.
Asimismo, detalló que celebrarán el juicio en el municipio de Nacaome, departamento de Valle. Luego, develó que tienen una gran cantidad de pruebas incriminatorias contra los supuestos actores del violento hecho.
Puede leer: Proponen 84 pruebas contra Isaí Evenot por la muerte de la fiscal Karen Almendárez
En ese sentido, refirió que los indicios apuntan a un autor intelectual, pero dijo que no afirmarán nada. Es decir, los operadores de justicia se encargarán de acusar al exfiscal Isaí Evenot Campos Rodríguez y exesposo de la infortunada.
«El Ministerio Público fue quien determinó esa tesis. Bueno, producto de ello es que el colega se encuentra guardando prisión», agregó.
Detalles
Un portavoz de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), en 2022 informó que el crimen de la fiscal Karen Almendárez «es pasional».
«El móvil es pasional, por la lucha de la situación desigual de poder y los pleitos y la cuestión de violencia doméstica», dijo Nolasco. Asimismo, añadió que la violencia «siempre estuvo presente» en el núcleo familiar de los involucrados.
Investigación
Nolasco detalló a Diario Tiempo que «las diligencias realizadas por la DPI en el transcurso de estos meses han sido meramente científicas y técnicas, porque hay relación mediante intervenciones telefónicas o celulares, mediante videos forenses».
Además, agregó que en dichos videos se puede ubicar a los hechores en la escena del crimen, y de igual manera «al otro autor intelectual en diferentes comunicaciones». Nolasco también señaló que, por medio de esas evidencias, el abogado acusado había planificado «desde hace muchos años quitarle la vida a su esposa».