Redacción. Mayores detalles surgieron la mañana de este domingo tras el dantesco hallazgo de los cuerpos sin vida de una pareja a inmediaciones del concurrido bulevar Fuerzas Armadas (FFAA) de Tegucigalpa.
Aunque las víctimas aún permanecen como desconocidas, ya que no portaban documentos personales, las autoridades adelantaron que se trata de una mujer y un hombre jóvenes, entre 20 y 25 años. El personal forense procedió con su levantamiento, por lo que los cuerpos se encuentran en la morgue judicial.
Los cuerpos quedaron en la orilla del bulevar: uno frente a una iglesia evangélica y el otro en un callejón lleno de maleza, a tan solo unos 40-50 metros. La sangrienta escena alarmó a los pobladores del sector, quienes se encontraron con ella en plena mañana.
El personal policial recolectó indicios en la zona cero. Es por ello que el levantamiento duró algunas horas y ahora sigue la investigación para determinar si a estas dos personas las sacaron de su casa en algún punto de la capital, luego les quitaron la vida y las fueron a lanzar en el bulevar, a escasos pasos de las gradas del Hato de Enmedio.
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Signos de tortura y disparos
Información emanada desde el lugar de los hechos indica que, al hacer la revisión previa, los agentes policiales a cargo de acordonar la escena se percataron de que a la pareja le quitaron la vida con arma de fuego.
Ambos cuerpos presentaban perforaciones en la cabeza, fulminantes, por lo que había cerca un gran charco de sangre. En el caso del cuerpo del hombre, esto era bastante visible porque estaba sobre el pavimento, al costado del bulevar.
Detallaron que las víctimas tenían atados sus manos y pies con lo que parecía alambre de las cableras, además de fajas (cinturones). También podrían haber sido torturados antes de los disparos, pues presentaban golpes en sus cuerpos.
Por ahora no se conoce el móvil del crimen ni las posibles causales. En el sitio no se encontró ningún casquillo de arma de fuego, y los vecinos no escucharon disparos durante la madrugada o mañana.
En consecuencia, serán las autoridades quienes determinen el origen del doble crimen. Los cuerpos se encuentran en la morgue en calidad de desconocidos, por lo que se hace un llamado a que cualquier familia con un desaparecido o raptado se apersone y constate los detalles.
