AFP. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, calificó como «lamentable» la muerte de seis migrantes en Chiapas a manos del Ejército y pidió sancionar esa tragedia.
El incidente del pasado martes durante una persecución por carretera en el sur del estado sureño de Chiapas, «tiene que ser investigado y castigados, dijo Sheinbaum.
A su vez, añadió que las víctimas eran de Egipto, El Salvador y Perú.»Una situación como ésta no puede repetirse», lamentó.
El gobierno de Perú pidió «una investigación urgente» sobre lo que calificó de «acto reprobable».
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Medidas
Según el Ministerio de Defensa mexicano, dos soldados abrieron fuego contra el convoy de migrantes en Chiapas, sin embargo ya fueron apartados de sus funciones a la espera de una investigación.
México ha desplegado en los últimos años a los militares para tareas de seguridad ciudadana. Amnistía Internacional acusó en abril a estos efectivos de usar «fuerza innecesaria y excesiva».
El martes, la vocera de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) expresó su preocupación por los migrantes.
«Por el papel cada vez más importante que han asumido los militares en la seguridad pública y otras funciones de aplicación de la ley», destacó a la presidenta.
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Riesgos
Los migrantes «están expuestos a grandes riesgos durante su viaje, por lo que es esencial contar con vías legales de acceso, para evitar tragedias como esta», afirmó Sheinbaum.
El hecho ocurrió el mismo día en que asumió como presidenta en el que negó que exista una militarización del país y las violaciones a los derechos humanos.
Según un informe policial, miembros de las fuerzas armadas persiguieron y dispararon contra un camión por saltarse un control en Chiapas.
