TEGUCIGALPA, HONDURAS. La Secretaría de Salud (SESAL), rechazó y se mostró en contra de la propuesta elevada al pleno del Congreso Nacional (CN) y que está orientada a dar un bono de 2,500 lempiras a las mujeres que se operen para no tener más hijos.
El proyecto de ley lo presentó la diputada por el Partido Nacional, Carolina Flores Méndez, quien aseguró que es un incentivo para mejorar la calidad de vida de las familias hondureñas.
Sin embargo, la secretaría detalló a través de un comunicado que como ente ofrece los servicios de salud sexual y reproductiva. Entre ello se incluye la anticoncepción de forma quirúrgica, pero voluntaria para todas las mujeres en los hospitales de la red pública. De la misma manera, en dos establecimientos para el caso de los hombres.
Según el documento, este servicio ofrece la consejería especializada en planificación familiar antes de realizar el procedimiento (operación). Asimismo, resalta que las personas deben estar muy seguras de no querer tener más bebés y además cumplir con una serie de requisitos ya establecidos.
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«La Secretaría de Salud rechaza rotundamente a la propuesta de brindar inventivos económicos o de otro tipo a las mujeres por realizarse dicho procedimiento. En el marco de los derechos sexuales y reproductivos, es fundamental garantizar la autonomía, dignidad y libertad de decisión de todas las personas, especialmente las mujeres», destaca el comunicado.
Preocupaciones
Por otro lado, la SESAL destacó que el ante proyecto de ley que propuso la diputada Carolina Flores Méndez, plantea serias preocupaciones éticas, legales y de derechos humanos.
También, el ente estatal describe que la esterilización tiene que ser una decisión voluntaria y previamente informada, basándose en el pleno consentimiento de la persona que busca hacérsela.
«Ofrecer pagos a las mujeres para someterse a este procedimiento puede coaccionar a aquellas que se encuentran en situaciones económicas precarias. Esto, comprometiendo su capacidad para tomar decisiones autónomas», agregó Salud.
En tal sentido, recomienda que la autonomía y dignidad de las mujeres se debe respetar en todo momento. Asimismo, cualquier forma de coacción económica es inaceptable.
Por último, la SESAL aseguró que es esencial que las políticas públicas de salud sexual y reproductiva debe ser respetuosas de la determinación de cada mujer.
