REDACCIÓN. El Viernes Santo es uno de los 7 días que conforman la tradicional celebración de la Semana Santa en gran parte del mundo, y en el mismo se conmemora uno de los episodios más representativos, y reflexivos.
Cada Viernes Santo se conmemora el sexto domingo de Cuaresma, anualmente, da inicio a la semana más importante para la Iglesia católica, grupos cristianos y sus fieles devotos.
Según información del Vaticano, el día en concreto antiguamente se celebraba como luto y se solía practicar la abstinencia de comer y beber. Aunque, luego terminaría significando la celebración de la solemnidad más tradicional de cada viernes durante la Semana Santa.
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Liturgia del Viernes Santo
Está compuesta por 3 momentos primordiales tales como la liturgia de la palabra, adoración de la cruz y comunión. Con cada uno de estos ritos, que conforman el conjunto de prácticas establecidas para llevar a cabo actos ceremoniales, se evoca e invita a los fieles a fijar su mirada en Cristo.
Por otra parte, se menciona que el Viernes Santo y el día siguiente solo se celebran 2 sacramentos. Es decir, la penitencia y la unción de los enfermos.
Cabe mencionar que como día central, la Iglesia católica le rinde honores a esta fecha de Semana Santa a través de la celebración de la Pasión del Señor. En esta se acostumbra a apagar las luces y guardar silencio al comienzo del acto litúrgico.
Durante la festividad cristiana se conmemora la crucifixión y muerte de Jesús de Nazaret un día después del Jueves Santo. (Lavatorio de los Pies y la Última Cena de Jesucristo con los Apóstoles).
Antes del domingo de pascua es obligatorio y habitual que los fieles católicos, como símbolo de penitencia, guarden ayuno y se abstengan de comer un alimento rico en proteínas.