Redacción. Un joven alegre, con un fervoroso amor por Dios, era el pastor Selvin Sabillón, quien murió a manos de desalmados mientras realizaba la entrega de unas joyas en el barrio Guadalupe, San Pedro Sula.
A sus 34 años, Sabillón había encontrado su vocación no solo en su fe, sino también en su labor de vender joyas, lo que le permitía mantener un equilibrio entre sus aspiraciones profesionales y espirituales.
Nació espiritualmente en la congregación de Petoa, Santa Bárbara; sin embargo, sintió un llamado profundo hacia el liderazgo. Este impulso lo llevó a mudarse a la iglesia de la aldea Chalmeca, en Nueva Arcadia, Copán, donde continuó creciendo en su fe.
Sueños
Según el medio de comunicación Hoy Mismo, Sabillón vendía joyas en línea junto a su prometida, con la que se iba a casar el próximo año. Sin embargo, el destino le hizo una cruel jugada, y su sueño de un futuro juntos se desvaneció trágicamente.
El líder religioso supuestamente se negó a entregar las joyas a unos asaltantes quienes sin piedad le arrebataron la vida de varios disparos. El cuerpo quedó tendido junto a la motocicleta en la que se transportaba.
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Los familiares retiraron el cuerpo de la morgue y lo llevaron hasta Pueblo Nuevo, Santa Bárbara, en donde le darán cristiana sepultura.
Los amigos y seres queridos han lamentado la pérdida de Sabillón dejando múltiples mensajes:
“Él era un hombre ejemplar, de esos que no abundan. La crisis que vivimos en el país es tremenda, y esta tragedia es una muestra de ello”.
“Selvin es un buen cristiano, una persona tan humilde, servicial, alegre, que Dios lo reciba, mi amigo Selvin lo recordaré siempre en sus bromas”.
“Pido que se arrepientan lo más pronto posible de todo pecado para que alcancen misericordia de Dios”, exhortó un internauta a los asesinos.
“Qué tristeza, hasta cuándo terminará esto, qué dolor para la familia y gran gozo en el cielo, un ángel más”.
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