TEGUCIGALPA, HONDURAS. De acuerdo al Observatorio Nacional de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH-ONV), en el país cada 14 horas muere violentamente una mujer.
En ese sentido, la coordinadora del ONV, Migdonia Ayestas, dijo que en promedio cada 14 o 15 horas muere de forma violenta una mujer en Honduras. Además, indicó que este fenómeno representa una de las mayores preocupaciones. Lo anterior, no por el número de víctimas, sino por la gravedad del daño.
“Cuando se analizan las lesiones, las agresiones, ya sean físicas, psicológicas o sexuales, se evidencia que se vuelve tan reiterativo. Entonces, la mujer pasa posteriormente a ser víctima de la violencia”, explicó Ayetas.
Al mismo tiempo, detalló que esa gravedad tiene que ver con el desprecio. Así como con el odio y la saña con que se les quita la vida a las mujeres en la nación.
En relación a la muerte contra los hombres, la coordinadora del ONV señaló que en su mayoría, quienes en su posición de esposos o compañeros sentimentales, les quitan la vida a las féminas. Esto, al considerarlas como un objeto y no como un sujeto de derechos. Es por ello, que creen que son parte de sus posesiones personales.
“Esto llega a tal grado que cuando la mujer intenta separarse, el hombre puede quitarle la vida. Lastimosamente, es algo arraigado en una sociedad que tiene mucho machismo en su cultura, lo que hace que se vea normal”, sostuvo Ayestas.
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Principales armas homicidas
Según lo informado por las autoridades del ONV, generalmente los hombres son asesinatos en hombres son con arma de fuego. Por su parte, las mujeres, en su mayoría, son ejecutadas con arma blanca y por hombres.
De acuerdo al último informe divulgado por el Centro de Derechos de la Mujer (CDM), durante los primeros 10 meses de 2017 fueron asesinadas 236 hondureñas.
Los datos oficiales de la UNAH serán presentados a mediados de febrero. Esto, ya que el personal del ONV se encuentra en proceso de validación.
Para prevenir este tipo de acontecimientos en contra de la población femenina y hondureña en general, Ayestas recomendó a los padres de familia y profesores dar a sus hijos o alumnos un trato igualitario e inclusivo.
“Tenemos que educar a nuestros hijos sin estereotipos o distinciones por su género. De su lado, al Estado, impulsar políticas públicas orientadas al fortalecimiento de las capacidades de las mujeres”, puntualizó Ayestas.
