SAN PEDRO SULA. La medida de detención judicial les dictaron ayer lunes a los capturados durante rapto de una pedagoga el pasado domingo en la zona norte del país.
Miguel Ángel Ponce Ramos y Williams Alexander Martínez Recarte fueron trasladados a la cárcel de El Progreso. Mientras tanto, las autoridades llevaron a un tercero y menor de edad, a un centro para menores.
Un juez dictó la medida en una audiencia de declaración de imputado que se celebró en los juzgados sampedranos.
Las autoridades policiales informaron que a eso de las 7:20 pm a través de una llamada al 911 les alertaron que unos individuos se habían llevado raptada a una mujer. A quien interceptaron en la prolongación de la Avenida Junior. Esto, a inmediaciones de la entrada a la colonia Villa Florencia, en su camioneta Honda color gris.
Mediante el monitoreo que realizaron a través de las cámaras del 911 localizaron el carro cuando entró en el estacionamiento. Esto, en un centro comercial en el Bulevar del Norte. La central de comunicaciones del 911 alertó a los patrulleros que los delincuentes estaban en el centro comercial. Asimismo, que se habían bajado a un cajero automático donde la víctima estaba siendo víctima de un secuestro exprés.
LA OBLIGARON A SACAR DINERO DE CAJERO
De inmediato se desplazaron al lugar varias patrullas de la Policía Militar y la Policía Nacional, justo en el momento que los malhechores se iban a subir al carro. Lo anterior, con la afectada y el dinero que sacaron del cajero automático.
Se informó que los delincuentes al ver a los policías intentaron huir y dispararon contra los uniformados. Por lo que estos repelieron el ataque haciendo uso de sus armas. Los militares y los policías les poncharon las llantas al carro y capturaron a los secuestradores.
Al lugar llegaron familiares de la afectada. Quienes relataron que la pedagoga acababa de salir de la zona, adonde se reúnen los miembros de una iglesia evangélica a la cual ella asiste.
Se informó que los maleantes se le subieron a la agraviada cuando el carro estaba parado esperando que avanzara la fila de vehículos. Los parientes de la pedagoga indicaron que los malhechores obligaron a la profesional. Los capturados dijeron en ese momento que por necesidad cometieron el delito, ya que no tenían trabajo.
