TEGUCIGALPA, HONDURAS. En Tegucigalpa, al igual que en San Pedro Sula, será difícil que el sector de los taxis reanude operaciones, pues representan las zonas con más contagios de COVID-19, así lo explicó ayer el dirigente del rubro, Pedro Gómez.
«Estos departamentos serán los últimos porque debemos acordarnos que son los más afectados por la pandemia. Y nosotros los puntos de taxis vamos a ser los últimos porque no podemos ir a poner 10 carros a punto porque nos va a salir más caro el collar que el perro. No nos va a matar la pandemia sino que los mareros», dijo Gómez a Diario TIEMPO Digital.
De ese modo, el ruletero explicó que como rubro tienen doble problema y que hasta que se active normalmente la economía comenzarán a operar.
«Los usuarios de nosotros son estudiantes universitarios, empleados públicos y todo lo que es la economía informal. Pero si está gente no trabaja, ¿a quién vamos a jalar?», preguntó el entrevistado.
Por lo anterior, Pedro Gómez confirmó que aún no tienen una fecha específica para comenzar sus actividades normales como rubro.
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«Mejor me gasto el dinero en comida para mis hijos»
Han tenido pocas reuniones con las autoridades del Instituto Hondureño del Transporte Terrestre (IHTT) pero mantienen diálogo abierto, indicó.
«Nosotros sabemos que para qué vamos alucinar. Nosotros vamos hablar realidades. Nosotros en los puntos de taxis tenemos doble problema. Entonces, tal vez los carros de la calle puedan hacer un proyecto piloto pero yo soy sincero. Para gastarme tres mil lempiras en poner un sistema de bioseguridad en un carro para dividirlo, mejor me los gasto en el supermercado para la comida de mis hijos», aseguró el dirigente.
En virtud de eso, dijo que la propuesta del sector de los taxis continúa siendo la misma: el bono y la bolsa solidaria para sus compañeros.
«Eso es algo que sirve para ir saliendo y que la gente tenga algo que comer. El 60 % de los hondureños vivimos el día a día. Algunos hondureños tienen recursos para sostenerse por bastante tiempo pero entre un 70 y 80 % de la población no lo creo», lamentó.
Pedro Gómez reiteró que para el rubro del transporte será dificultoso que reanuden operaciones en Tegucigalpa. «Tanto para buses como en taxis es difícil que reanuden actividades porque si no se abre la economía no se tiene nada de usuarios», cerró.
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