VILLANUEVA, CORTÉS. Un equipo musical valorado en más de 200 mil lempiras fue robado de la iglesia católica Sagrado Corazón de Jesús, en Villanueva, Cortés, al norte de Honduras.
Pobladores y vecinos de dicha comunidad no salían de su asombro, pues al llegar al recinto religioso esta mañana lo encontraron abierto y saqueado.
Micrófonos, guitarras y demás instrumentos de sonido que permanecían en el interior de la iglesia fueron robados. Hasta el momento autoridades policiales desconocen la identidad de los criminales sin escrúpulos que habrían cometido el robo.
Según informe preliminar se cree que la acción delictiva se llevó acabo entre la noche del sábado y la madrugada de este domingo.
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Queman y ‘deshuesan’ una ambulancia en Villanueva, Cortés
Aproximadamente a las 10:00 de la mañana de este martes se reportó una ambulancia quemada en Villanueva, Cortés. Esta unidad pertenecía a una CLIPER del municipio referido.
De acuerdo a los reportes, la unidad fue incendiada en medio de los recientes disturbios. Según trascendió, esto habría sucedido en la madrugada del viernes en Dos Caminos, Villanueva.
El vehículo funcionaba para la Clínica Periférica de Maternidad de Villanueva. Las autoridades del centro asistencial indicaron que hasta el momento no cuentan con unidades nocturnas para movilizar embarazadas.
‘Deshuesada’
La armazón de la ambulancia fue hallada quemada totalmente. Cabe señalar que el motor, así como otras piezas importantes, no se hallaban entre los despojos. Se sospecha que estas partes fueron robadas por desconocidos.
Según indicaron testigos, individuos con el rostro cubierto fueron los malhechores pirómanos. Estos habrían detenido la ambulancia en el camino y obligado a desabordar a sus pasajeros.
Entre los tripulantes iba una embarazada camino al hospital, quien fue forzada a bajarse de la unidad. El bebé de esta fémina murió en su vientre, de acuerdo a la versión preliminar que se maneja.
El automotor venía de un traslado cuando varios sujetos lo interceptaron e hicieron bajar al motorista, la encinta y la enfermera. Una vez vacía, los desconocidos la rociaron de gasolina y le prendieron fuego.
