Redacción. La vida le dio una segunda oportunidad a Elmer Eleazer Castro, de 20 años, quien se ganaba la vida como repartidor (‘delivery’) en San Pedro Sula, Cortés. El fin de semana, fue víctima de un violento asalto mientras entregaba un pedido en su motocicleta.
El joven relató recientemente al medio de comunicación HCH el difícil momento. «Sí, gracias a Dios ya estoy bien. No sentí nada de desvanecimiento, todo normal, nada más el sangrado», afirmó.
Explicó que, tras entregar un pedido y estar aparcado en su moto, vio acercarse al individuo (alias El Burro), el mismo delincuente que ya se encuentra detenido por la Policía Nacional.
«Sí, fíjate que sí lo miré, pero no le puse mucha atención porque no me imaginé que iba a asaltarme, y de repente él ya lo tenía a la par y estaba amenazándome», detalló al periodista que lo entrevistaba.
Elmer Eleazer se opuso al robo de sus pertenencias, una reacción que provocó la ira del asaltante. «Sí, porque, claro, son las cosas de uno, pues; imagínese que alguien venga nada más a quitársela… la rabia», explicó.
En ese momento, el delincuente le disparó y logró llevarse únicamente el teléfono del joven.
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Odisea de la bala
El disparo fue a quemarropa. «Entró por el pecho y se buscó hacia la axila, y ahí salió de la axila; entró al brazo y ahí se quedó en el brazo derecho», detalló el repartidor Elmer.
Lo más sorprendente fue su traslado inicial. Después del ataque, y con el miedo a desmayarse por el sangrado, se dirigió a su casa. «Sí, logré llegar», con la bala en el cuerpo, dijo. Luego su madre lo llevó al Hospital Mario Catarino Rivas.
Fue en el centro asistencial sampedrano donde recibió una insólita «receta». Un médico lo atendió de emergencia, le limpió las heridas, pero la determinación fue que no sacarían el proyectil.
«El médico ahí nos atendió bien, nada más de emergencia, pero sólo nos sanaron las heridas, las limpiaron y nos dijeron que no era necesario sacar la bala, que me iba a quedar de memoria, de recuerdo», relató.
Intervención oportuna
Ante la negativa de extraer la bala, la madre del joven, doña Paty, gestionó el traslado. Gracias a las gestiones del alcalde Roberto Contreras, el joven fue atendido y operado en el Macro Distrito de Las Palmas.
«Sí, así es, gracias al alcalde que nos dio ahí el apoyo», dijo Elmer, donde finalmente le extrajeron el proyectil.
Afortunadamente, no sufrió daños en órganos vitales. «No siento nada de dolor; ahorita ya sólo queda recuperarme», expresó.
Doña Paty, la madre, relató la angustia. «Yo lo que quería era tener alas para llegar donde él estaba.» Aunque tiene temor por haber interpuesto la denuncia, reconoció la prontitud de la Policía en la captura del asaltante.
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Elmer Eleazer Castro es estudiante de mecánica de motos en el Centro de Capacitación Técnica Honduras-Corea y manifestó que ya no continuará con el empleo de ‘delivery’.
«De que hasta ahí iba a llegar, lamentablemente», expresó. La familia ahora busca un empleo seguro para el joven, quien tiene todos sus documentos en regla y sigue enfocado en sus estudios.
