San Pedro Sula, Honduras. Más de 1,500 sampedranos se unieron para pedir la aprobación de la Ley de desplazamiento y mostrar su solidaridad hacia los más de 247,000 hondureños que han huido de sus hogares como consecuencia de la violencia.
Esta actividad se realizó bajo el lema ¡Súmate para cambiar esta realidad!.
La carrera de colores ¡Oué Pinta! se realizó en San Pedro Sula, el municipio más afectado por el desplazamiento forzado, causado por las extorsiones, asesinatos, control territorial y social y la vinculación forzada de niñas y niños.
Lea también: Seguidores de Contreras protestan por incremento a canasta básica
Jóvenes, integrantes de la comunidad LGBTIO+, familias y voluntarios de organizaciones, sumaron sus voces y firmas para manifestar el apoyo o contar con medidas integrales para proteger y atender los necesidades de quienes están impactados por esta realidad o través de la Ley de prevención, atención y protección o los personas desplazadas internamente.
La Ley de desplazamiento es una iniciativa presentada por la Comisión Interinstitucional para la Protección de Personas Desplazadas por la Violencia (CIPPDV). Ésta busca impulsar políticas de prevención, atención, protección y búsqueda de soluciones duraderas a personas desplazadas.
Durante la carrera se lanzaron polvos de colores y, al cierre del evento, se presentó la artista Cesia Sáenz, quien se sumó a la petición para la aprobación de la Ley.
Lo carrera fue organizada por lo Municipalidad de San Pedro Sula, además de ACNUR la Agencia de la ONU para los Refugiados, Children International, Warriors Zulu Nation y Jóvenes contra la Violencia.
Niños, los más vulnerables al desplazamiento forzado
El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), informó que los niños son el segmento poblacional más vulnerable ante el desplazamiento forzado por la violencia que impera en el país.
Según el CONADEH, entre 2019 y 2021 unos 1,162 niñas, niños y adolescentes se vieron forzados a huir de sus hogares por la violencia.
Asimismo, uno de los principales peligros que enfrentan los menores es su susceptibilidad de que las maras y pandillas o el crimen organizado los recluten.
«Tienen amenazadas familias enteras que se oponen a que sus niños se incorporen a las actividades delictivas de estos grupos», indicó el CONADEH.
La comisionada Blanca Izaguirre hizo un llamado a la reflexión a las autoridades hondureñas para que tomen acciones. De esa manera, evitar así que los niños abandonen sus lugares de origen. En tal sentido se sugiere la aprobación de una Ley para la Prevención, Atención y Protección de Personas Desplazadas Internamente.
